Hace dos años Federated Hermes, gestora resultante de la fusión de Federated Investors con Hermes IM, optó por impulsar su negocio en España con la puesta en marcha de una oficina de representación local. La abrió en julio de 2020, en plena pandemia, y sitúo al frente de la misma a Carlos Capela, que no solo da servicio a los inversores españoles sino también a los de Portugal o Andorra.
Muestra de su crecimiento en nuestro país se ve en que en los últimos meses ha ampliado su equipo con el fichaje de Melanie Lange, que se ha incorporado al equipo de ventas de una gestora que cuenta ya con casi 650.000 millones de dólares en activos bajo gestión a nivel global y cuya plataforma de proxy voting y engagement, EOS, supervisa un patrimonio de 1,75 billones de dólares.
Según explica Capela, en este tiempo han notado un cambio significativo en las preferencias de sus clientes. Si bien los clientes finales siguen teniendo un perfil más conservador que en otros mercados, sí ha notado que han ido variando su perfil de rentabilidad riesgo en lo que respecta a la renta fija. "Ha habido un salto hacia posiciones más agresivas ya que a mucha gente le ha salido bien aumentar su perfil de riesgo en los últimos años", asegura. Y aunque reconoce que ahora sí se nota una mayor preocupación por el tema de las valoraciones, "hay poco movimiento ya que la alternativa en renta fija es asumir una rentabilidad negativa", afirma. De hecho, ha notado un aumento del interés hacia la renta fija emergente como vía para conseguir esa rentabilidad que cada vez es más complicado obtener en el mercado de deuda.
Qué les pide el inversor español
"Lo que nos pide el inversor español son estrategias de emergentes, pero también notamos entradas de dinero en renta fija flexible y en high yield sostenible" afirma. Y destaca que, sobre todo por parte de los clientes más institucionales se está notando un mayor interés hacia los activos alternativos. "Nos parecía una aberración que en España no se tuvieran en cuenta, pero ahora todo el mundo habla ya de ello, es un tema de educación financiera", asegura.
De hecho, está convencido que este tipo de activos son claves para el buen comportamiento de la industria de gestión. Sobre todo para la activa como es el caso de Federated Hermes, ya que es un tipo de inversiones que no es fácilmente replicable. "Creo que la industria va hacia un modelo de inversión pasiva combinado con una gestión activa en aquellos mercados que son más ineficientes, que son en los que se puede generar alpha", afirma. Y avisa: “Si el producto que ofrece una gestora es una commodity, no puedes cobrar comisiones altas”.
La ESG, en su ADN
Junto al auge de los activos alternativos ilíquidos, subraya también la importancia que está cobrando entre los distribuidores la ESG. Demanda que tienen más que cubierta. Primero porque la gestora, a la que incluso llamaban hace años la “hippy de la City”, presidió el comité de redacción de los PRI de la ONU (Principles for Responsible Investment). Y segundo, gracias a EOS, un proveedor de servicios de stewardship fundado por la gestora en 2004 y que cuenta con 1,75 billones de dólares bajo supervisión a través de sus servicios de implicación corporativa y proxy voting.
Con esta herramienta lo que buscan es conseguir una mayor implicación con las compañías ya que los inversores con menores capacidad en ESG delegan en ellos el engagement que tienen con las empresas para conseguir de una forma colaborativa diferentes objetivos en cuanto a sostenibilidad. Con esta rama de negocio como parte de la gestora es normal que todos sus fondos estén clasificados como artículo 8 o 9 según el Reglamento SFDR.
En cuanto a los planes que tiene la firma para España, Capela se muestra tranquilo ya que al ser una empresa familiar huye del corto plazo y piensa en plazos más largos. "No se nos ha marcado ningún objetivo anual, sino que lo que quieren es que la oficina sea rentable y eso da mucha tranquilidad, afirma.
