Carmen Alonso (Tikehau): “Para invertir en mid market es fundamental tener equipos locales e invertir de forma local”

Carmen Alonso. Foto cedida (Tikehau Capital)

Equipos locales para invertir de forma local. Es una de las señas de identidad de Tikehau Capital. La gestora francesa especializada en alternativos ha desembarcado en las principales regiones. Estados Unidos, Asia, Europa. Siempre con la filosofía de abrir oficinas locales con equipos locales. De crear equipos nacionales tanto de originación como de gestión, principalmente en Europa. Y la oficina de Iberia es un ejemplo más de esa filosofía.

Tikehau Capital llegó a Iberia en 2015 de la mano de Carmen Alonso, responsable de la región, con el objetivo de encontrar en la península oportunidades de inversión en deuda privada. Seis años después, con la apertura de la oficina local entre medias, ya cuenta con múltiples inversiones en Iberia en todas sus estrategias, deuda privada, private equiy e inmobiliario. Por ejemplo, la compra de una cartera de oficinas en Barcelona y Madrid así como la adquisición del negocio de biomasa de Acek Renovables en el 2020 para su estrategia de private equity.

El objetivo de Tikehau Capital es desarrollar una cartera diversificada. También de forma geográfica. “Y para encontrar las mejores oportunidades en el segmento de mid market como lo hacemos nosotros, creemos firmemente que hay que tener equipos locales que inviertan de forma local”, afirma Alonso. Es lo que permite crear un verdadero ecosistema, explica. Tejer esa red de contactos que permita identificar y distinguir las compañías buenas de otras no tan buenas.

Y cita una frase de uno de los cofundadores de la firma francesa: “Good deals have no wheels”. Es decir, los buenos negocios no viajan sobre ruedas. “Si a un equipo de inversión en Londres le llega una oportunidad en España, debería preguntarse por qué los equipos locales de allí no están invirtiendo en ella”, explica Alonso.

Para encontrar las mejores oportunidades hay que estar sobre el terreno, pero también tener el expertise preciso para saber reconocerlas y seleccionarlas. Y la crisis actual solo lo ha puesto en relieve. “La pandemia ha recordado lo importante de tener esa cercanía”, sostiene Alonso. En un contexto de confinamiento, fue clave para potenciar la comunicación y asegurar la estabilidad de los porfolios.

Cuando estalló el COVID-19, quedó patente que la cercanía era crítica. “Es lo que nos ha dado la capacidad de ser ágiles a la hora de responder”, cuenta Alonso. Al igual que la economía global entró en confinamiento, el pipeline de operaciones se paralizó. Pero aún había trabajo por hacer. “Nos volcamos en las compañías en cartera, asegurándonos de que tenían la flexibilidad y liquidez suficiente para afrontar esta crisis”, rememora.

La inversión de impacto busca su momento

Y ahora que el mundo mira hacia la normalización, los procesos de fusiones y adquisiciones también despiertan. Lo hemos visto con las importantes cifras de crecimiento en las emisiones de deuda privada. Pero el acceso a la liquidez no se ha repartido por igual. Sectores como el B2B, la tecnología o el fintech o sanidad han salido reforzados y con viento de cola para crecer. En cambio, industrias como la hostelera, la restauración o el turismo siguen afectados.  

Una tendencia que sí parece ser estructural es la ASG. En Tikehau Capital los criterios sostenibles se integraron en su proceso hace años, pero ahora se ha convertido en una práctica estándar en la industria. Una ola verde que también está pasando por la inversión en ilíquidos. Tras captar más de 1.000 millones para el fondo de private equity de transición energética T2 Energy Transition, por encima del objetivo inicial, la firma lanzó la réplica de la estrategia, ahora centrado en el mercado norteamericano. “La transición energética y la descabonización es todo un reto. Y nosotros nos vemos como actores importantes en su impulso”, sentencia Alonso.