Durante la X Jornada de Securities Services, organizada por Cecabank- Expansión con la colaboración de FundsPeople, los expertos reflexionaron acerca de las posibles implicaciones de la IA a la gestión de activos, como la puesta a disposición de información o la modelización de informes.
La tecnología ha ido ganando peso en la gestión de activos en los últimos años. Y ya no solo porque ofrece una reducción de los costes y una mayor eficiencia, sino también porque la Inteligencia Artificial (IA) contribuye a mejorar los procesos y puede ayudar a los gestores a simplificar su labor, que no a sustituirla. Sobre ello se habló durante el la X Jornada de Securities Services, organizada recientemente por Cecabank-Expansión con la colaboración de FundsPeople.
Laura Comas, consejera de CaixaBank AM y directora de Desarrollo y Transformación de Banca Privada de CaixaBank, explicó que la entidad lleva desde el año 2014 trabajando con la IA: “Ya está implantada en procesos concretos de la entidad, como el asistente digital Noa, que permite contactar con clientes, responder a sus preguntas e incluso ejecutar operaciones como el bloqueo de tarjetas”. Pero las implicaciones van más allá y la IA generativa cambia la velocidad de lo que ya habían implantado. “Hemos puesto en marcha un proyecto con Microsoft y Accenture con cerca de 100 profesionales de análisis de la IA. Permitirá probar modelos GPT en un entorno seguro y analizar desarrollos que aún no están en mercado. Nos permite analizar el potencial de la IA y decidir dónde se podría implantar porque mejora ciertos procesos sin riesgos. Por ejemplo, a fin de optimizar la agilidad de los procesos, la atención a clientes o modelos de riesgos", concretó. En opinión de Comas, "la IA ayuda a los gestores a liberarse y dedicar ese tiempo a nuestros clientes”.
Ojo: no sustituirá al gestor o asesor
Este potencial de la IA generativa lo conoce muy de cerca Salvador Mas, CEO de GPTadvisor, que sugiró que “estamos en una época tan efervescente o más que la puntocom”. El experto reflexionó sobre la entrada de Chat GPT en la sociedad: “Fue un shock inesperado, es el producto por excelencia de la IA generativa, capaz hacer una actividad como leer, razonar o escribir que, hasta ahora, estaban reservadas para humanos”, explicó.
Comas enfoca las funciones de esta tecnología a mejorar la puesta a disposición de la información o incluso subraya su utilidad a la hora de detectar el sentimiento de mercado o en la modelización de informes. Y advirtió: “No estamos viendo un cambio transformacional enorme que pueda sustituir la labor del asesoramiento financiero, pero sí podría ayudar al gestor en la toma de decisiones”. Algo en lo que coincidió con Mas: “Los clientes seguirán hablando con un humano, pero este tendrá una mayor productividad. Al cliente no se lo va a llevar la IA, sino un gestor que utiliza la IA”, subrayó.
¿En qué punto está la regulación?
El marco regulatorio que rige la IA ha ido evolucionando en España y a nivel internacional. La propuesta de Reglamento de Inteligencia Artificial está ya a punto. Por lo que María Vidal, socia de finReg360, avisó de que “antes de verano tendremos la Ley de Inteligencia Artificial europea”.
El objetivo de esta ley, explicó, “es adoptar una IA centrada en el ser humano y fiable. Regula y compone en alta protección, salud y seguridad todos los principios europeos. Llevado al sector, hay que empezar por ver qué es un sistema de IA. Inventariar hasta qué punto son inteligentes los sistemas que tenemos implantados. Esto es, que el sistema sea autónomo, capaz de adaptarse y que cuando nosotros tenemos un objetivo específico, nos pueda dar datos, predicciones o recomendaciones”, apuntó.
Además de esta ley, también hay dos propuestas sobre la mes: una de modificación de directiva de productos defectuosos de IA y otra propuesta de directiva de responsabilidad de la IA. Ambas son de 2022, comentó Vidal.