El caso de un ETF alineado con los Acuerdos de París que sí ha logrado mantenerse como producto Artículo 9

Bolígrafo rojo
Visentico Sento, Flickr, Creative Commons

Ha sido un aluvión. La reclasificación de fondos artículo 9 a artículo 8 se ha producido en forma de tsunami. Han sido muchos los productos rebajados, tanto de gestión activa como ETF. En lo que respecta a los fondos cotizados, las degradaciones han afectado principalmente a estrategias alineadas con los Acuerdos de París, muchos de los cuales han pasado de Artículo 9 a Artículo 8. ¿Por qué? Según José García-Zárate, director de Análisis de ETF en Morningstar, muchas gestoras están prefiriendo ser cautas. Por varias razones.

“Algunas no tienen capacidad o no quieren incurrir en el coste de calcular todas esas métricas. Otras las han calculado y han descubierto que no las cumplen todas. También las hay que las han calculado y, a pesar de que en teoría las cumplen, quedan dudas sobre la interpretación final sobre la definición qué es realmente inversión sostenible y qué no”, explica. En el caso de los ETF alineados con los Acuerdos de París, Zárate considera que la mayoría de estos productos están en el caso b. Es decir: “las gestoras habrían calculado las métricas, pero se habrían dado cuenta de que no las cumplen”, afirma el experto.

Sin embargo, aunque la mayoría de estos ETF han pasado del Artículo 9 al artículo 8, no ha sido así en todos los casos. Algunos se han mantenido como producto Artículo 9. Es el caso del Fidelity Sustainable Global Corporate Bond Paris-Aligned Multifactor UCITS ETF, fondo cotizado de renta fija formado por una cartera que ofrece exposición diversificada a bonos corporativos con grado de inversión mediante alrededor de 250 inversiones seleccionadas individualmente dentro de un universo internacional compuesto por aproximadamente 7.600 emisiones.

¿En qué consiste este producto?

“Este ETF trata de ofrecer unas credenciales de sostenibilidad excelentes y, por lo tanto, reúne los requisitos para acogerse al artículo 9 de la SFDR. No solo integra el análisis de la sostenibilidad en su proceso de inversión y se compromete a realizar inversiones sostenibles que no causen un perjuicio significativo, como se define en la taxonomía de la UE; también posee un objetivo de inversión sostenible explícito para estar en consonancia con los requisitos de reducción de las emisiones de los índices de referencia armonizados con el Acuerdo de París”, subrayan desde Fidelity International.

El objetivo de este producto es conseguir una reducción mínima del 50% de la huella de carbono (emisiones de gases de efecto invernadero brutas, así como intensidad de gases de efecto invernadero) frente a productos similares que replican índices que no están armonizados con el Acuerdo de París. También aspira a lograr como objetivo adicional una descarbonización mínima de sus inversiones del 7% anual, al igual que su índice de referencia: el Solactive Paris Aligned Global Corporate Index.

En la gestora integran las evaluaciones de sostenibilidad en sus estrategias sistemáticas mediante el marco de calificaciones ASG de elaboración propia de Fidelity. En este marco, los analistas fundamentales de la entidad en todo el mundo califican de forma integral a las empresas y las características de sostenibilidad de los emisores atendiendo a unos indicadores clave de desempeño específicos para más de 100 subsectores diferentes. “Eso genera datos detallados sobre aspectos medioambientales, sociales y de gobierno corporativo que nuestros procesos sistemáticos pueden aprovechar para buscar resultados de inversión concretos”, aseguran. Y también medirlos correctamente y, por lo tanto, mantener su estatus como producto Artículo 9.