Geraldine Sundstrom expone la visión secular y cíclica de la gestora americana.
Geraldine Sundstrom gestora del PIMCO Multi Asset Dynamic Allocation ha presentado las perspectivas seculares de PIMCO, que recogen la visión de la gestora a largo plazo para los próximos tres a cinco años. Y aunque el “new normal” sigue siendo el telón de fondo, puede haber jarros de agua fría en el camino, concretamente cinco, según el documento del que son autores Dan Ivascyn, CIO del Grupo, Andrew Balls, director de inversiones en renta fija mundial, y Joachim Fels, asesor económico mundial.
El futuro se ha vuelto más incierto, porque puede haber una aumento de la volatilidad derivada de la evolución de la macroeconomía, debido a que puede haber una vuelta a la recesión y un repunte de la inflación. El escenario principal de PIMCO para los próximos tres a cinco años incluye una probable recesión en EE. UU., que también podría afectar a buena parte de la economía mundial.
Además, y aunque no está en el escenario base de la gestora, puede haber un aumento de la productividad por las nuevas tecnologías. A largo plazo es bueno pero a corto hay que tener cuidado con tres factores clave: el posible aumento del paro, las dificultades de las empresas que se vean en dificultades con la llegada de las nuevas tecnologías y el .aumento de los tipos reales
El tercer jarro de agua fría sería consecuencia del mix de políticas fiscales y monetarias, ya que aumentar la deuda pública cuando los bancos centrales están intentado salir de la política acomodaticia puede implicar mayores primas en los tipos a largo plazo.
Los dos jarros de agua fría restantes son de naturaleza política. Los autores han bautizado como “la trampa de Tucídides” al escenario en el que una potencia nueva reta a otra ya establecida, ocasionando un conflicto (Atenas contra Esparta o, en la actualidad, China contra EE. UU.), por lo que el entorno geopolítico puede ser otra fuente de cambios bruscos.
La expansión y radicalización del populismo sería el otro riesgo político, sobre todo si llega una recesión. Según PIMCO, “algunas formas que podría tomar este giro populista son: redistribución de la riqueza a gran escala a través de más impuestos, proteccionismo agresivo, nacionalización de industrias clave o menor independencia de los bancos centrales”.
A propósito de estas fuentes de incertidumbre, Geraldine Sundstrom se ha referido al “enigma de la tecnología”. Y es que, según la gestora, la misma tecnología que ha contenido la inflación por su presión bajista sobre los salarios, no sólo en la industria, sino también en los servicios (los robots van haciendo de todo), lo que ha supuesto un marco positivo para los activos financieros, puede ser fuente de otras disrupciones más problemáticas. Y es que la tecnología es una de las causas del regreso de las guerras comerciales, y también, debido a la mayor difusión y alcance de la información, está de alguna forma relacionada con el crecimiento del populismo
Horizonte cíclico
Sobre el encuentro entre los horizontes secular y el cíclico, Sundstrom señala que el mundo sigue creciendo y la recesión no parece algo inmediato. Se trata del tercer ciclo económico más largo en muchas décadas, lo que puede generar cierta ansiedad entre los inversores. Para la gestora, lo que puede poner en peligro esa expansión duradera no es, de momento, ni la inflación, ni el exceso de inversión, ni el exceso de consumo. Lo que más le preocupa son los riesgos políticos y las guerras comerciales. “El Reino Unido ha tardado dos años en notar las consecuencias del Brexit, pero ahí están”, señala para añadir que no se puede saber todavía cuál será el efecto del populismo en Italia y de otros eventos políticos.
La traducción de estas visiones en las valoraciones y las posiciones de cartera se plasma en una clara preferencia por el mercado estadounidense de renta variable, sobre todo tras la corrección de principios de año. “Además, factores técnicos derivados de la reforma impositiva favorecen mucho a determinados tipos de compañías como las farmacéuticas y las tecnológicas. Si se analiza el nivel efectivo de muchas compañías, EE.UU. es el mercado mejor posicionado lo que puede favorecer las recompras de acciones, el reparto de dividendos y la actividad corporativa”, añade la gestora.
El crédito le parece una clase de activo más caro y sobre la duración, señala el problema del inversor basado en euro que tiene que escoger entre un carry mínimo o cubrir la curva USA y quedarse prácticamente sin carry. Para terminar su repaso a las clases de activos, Sundstrom se refirió a los mercados emergentes, donde está infraponderada, debido a la abundancia de incertidumbres políticas en Méjico y Brasil por las elecciones y en Rusia por las sanciones, aunque en su opinión si se evita una guerra comercial con China, en Asia va a haber oportunidades.