"El entorno de inversión está cambiando: el inversor será más proclive a aumentar el riesgo"

Gota
William Calvache, Flickr, Creative Commons

El hecho de que los inversores se muestren prudentes no constituye necesariamente una mala señal para los mercados de renta fija. Bien al contrario, ello hace más probable que haya suficiente liquidez disponible para estos mercados. “Parece improbable que este factor positivo vaya a garantizar que la deuda pública 'segura' y las categorías de renta fija de alto riesgo igualen en 2013 las excelentes rentabilidades cosechadas en 2012. Tanto los rendimientos como las primas de riesgo se encuentran en muchos casos en mínimos, lo que reduce la probabilidad de obtener rentabilidades por encima de la media”, aseguran en ING Investment Management.

Según explica la gestora en su informe sobre perspectivas de mercado para 2013, en carteras de renta fija ampliamente diversificadas, está previsto que el efecto adverso de cualquier mínima subida de la rentabilidad de la deuda pública de Alemania y Estados Unidos se vea compensado en su mayor parte por las menores rentabilidades en los segmentos de alto riesgo del mercado de deuda pública (España, Italia), así como por las rentabilidades dentro de las categorías de renta fija de mayor riesgo, como la deuda de alto rendimiento y los bonos de mercados emergentes.

Otro factor que, en opinión de ING IM, hay que tener en cuenta es que el entorno de inversión está cambiando de forma paulatina, gracias a la todavía incipiente recuperación económica, así como a la atenuación del riesgo sistémico. “Este entorno animará a los inversores institucionales a normalizar progresivamente la estructura de sus asignaciones tácticas de activos. En consecuencia, estos inversores serán más proclives a aumentar que a reducir sus posiciones sujetas a riesgo”, afirman desde la entidad holandesa.

Habida cuenta del sentimiento bajista y del posicionamiento infraponderado en renta variable de los inversores (fondos de pensiones, fondos de inversión, hedge funds, inversores privados), en la gestora creen que un eventual giro hacia activos de mayor riesgo podría generar presiones alcistas sobre la rentabilidad de la deuda pública (estadounidense y alemana), mientras que las primas de riesgo de los productos basados en diferenciales podrían continuar cayendo, aunque de forma moderada. Por todo ello, las categorías de renta fija de alto riesgo podrían quedar rezagadas con respecto a la renta variable, las acciones inmobiliarias y otras clases de activo de mayor riesgo.

La recuperación del crecimiento económico mundial sigue expuesta a numerosos factores de incertidumbre. Ello hace probable que los mercados continúen acusando una considerable volatilidad en 2013. En consecuencia, ING IM cree que parece razonable que los inversores mantengan una actitud flexible y estén alerta ante posibles oportunidades. “Si la incertidumbre creciera, sería conveniente responder con celeridad minorando los riesgos en cartera. En nuestra opinión, el comportamiento del sector de renta fija no vendrá determinada tanto por una adecuada percepción por los inversores de los acontecimientos futuros, como de su capacidad para adaptarse rápidamente a los constantes cambios en las condiciones de mercado”.

Optimistas sobre los productos con diferencial

“Somos relativamente optimistas sobre los productos con diferencial, que deberían continuar batiendo a la deuda pública ‘core’. Nuestro optimismo se basa en los fundamentales, en la actual búsqueda de rentabilidad por los inversores en un entorno de tipos de interés bajos y en las valoraciones relativas. Si las rentabilidades de la deuda pública subieran ligeramente, la rentabilidad de los productos con diferencial debería venir de la mano de una reducción de las primas de riesgo. A nuestro juicio, los bancos centrales mantendrán los tipos de interés en niveles extremadamente bajos durante algún tiempo más.

En este contexto, la firma considera que los inversores continuarán sintiéndose atraídos por las atractivas rentabilidades que la deuda de alto rendimiento y de mercados emergentes pueden ofrecer. “Aunque nuestro escenario base para la economía mundial no se cumpliera, las rentabilidades previstas para high yield continuarían siendo superiores a las de aquellas empresas de las que puede esperarse que entren en situación de impago. En cuanto a la deuda emergente, prevemos que un creciente número de inversores internacionales decidirá ampliar (atendiendo a los fundamentales de esta categoría de activo) su peso dentro de sus respectivas asignaciones tácticas de activos”.