El euríbor, la referencia a la que la mayoría de las hipotecas españolas ha cumplido en este mes de febrero su cuarto aniversario con tasas negativas ya que fue en febrero de 2016 cuando vimos el primer cierre mensual de este ratio hipotecario cerrando en niveles del -0,08%. A falta de conocer la cifra oficial que publica mensualmente el Banco de España, la previsión es que esta referencia haya cerrado el mes de febrero en el -0,285% y ello no solo implica una cifra inferior al -0,253% del mes de enero sino que supone un cambio de tendencia después de varios meses viendo al Euribor al alza.
Fuente: Asociación Hipotecaria Española
La culpa de este cambio de rumbo la tiene, como no, el coronavirus y, más concretamente el efecto que pueda tener en el crecimiento económico. No en vano, el auge de este nuevo virus ha ido acompañado de un empeoramiento de las expectativas económicas ya no solo para China, donde se conocieron los primeros casos de coronavirus, sino para el resto del mundo. Y no solo por el impacto que tiene China en el crecimiento mundial (supone cerca del 16% del PIB) sino porque la expansión del virus a prácticamente el resto del mundo, también implica una incidencia negativa en sus economías. De ahí, que cada vez sean más los expertos que abogan por una intervención más o menos conjunta de los bancos centrales para tratar de limitar ese efecto en la economía.
De momento, el mercado, el mismo que hace apenas una semana descontaba que la Fed no haría cambios en su política monetaria, estima ahora que el organismo presidido por Jerome Powell podría acometer no solo una sino dos bajadas de tipos este año para dar un nuevo impulso a la economía en tiempo de coronavirus. De hecho, el pasado viernes Powell ya aseguró que la Fed usará “sus herramientas y actuará de forma apropiada para ayudar a la economía estadounidense”. Y eso es lo que está detrás de que los mercados hayan optado por empezar la semana con alzas en lugar de retomar las fuertes caídas vistas la semana pasada, las mayores en una semana desde 2008.
Volviendo al euríbor, que mantenga su tendencia negativa los próximos meses dependerá de las decisiones que tome el BCE de Christine Lagarde. “En lo que respecta al BCE, tendrá que hacer un importante ajuste a la baja de sus previsiones de crecimiento, que ya eran demasiado optimistas para 2020 y 2021, incluso antes del coronavirus, y esto conducirá a una reducción de 10 puntos básicos en el tipo de interés de su facilidad de depósito”, afirman desde la gestora Groupama.
A la espera de ver si se mantiene la tendencia bajista del euríbor o se retoman las alzas, aunque aún dentro del terreno negativo, lo cierto es que la caída del euríbor ha supuesto un alivio para muchas familias españolas con hipotecas. De hecho, según el simulador de la Asociación Hipotecaria Española, si hace cuatro años la cuota mensual de un préstamo de 150.000 euros a Euribor más 1% a 25 años era de 559 euros, ahora esa cuota es de 546 euros.
Sin embargo, el efecto no ha sido igual de positivo para los bancos, que siguen notando en sus cuentas el efecto de unos tipos de interés bajos y a la baja. Eso explica que en los últimos años la práctica totalidad de las entidades financieros hayan optado por lanzar hipotecas a tipos fijos y que incluso la banca esté estudiando en fórmulas alternativas al euribor para financiar las hipotecas a futuro.