El QE en clave española: cuatro entidades nacionales dan su visión

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European Parliament, Flickr, Creative Commons

Mario Dragghi anunciaba ayer el programa de compra de activos, que comenzará en marzo de este año y se extenderá “al menos” hasta septiembre de 2016, al ritmo de 60.000 millones de euros mensuales (incluidos los 10.000 que habían estado comprando hasta ahora de ABS y titulizaciones). Nace así el QE europeo, denominado Expanded Asset Purchase Programme (EAPP), un programa que muchos inversores contaban con que iba a ser anunciado, aunque desconocieran en que forma iba a ser ejecutado.

Una vez más, el Banco Central Europeo vuelve a convertirse en el centro de atención de los mercados y, por ello, desde Funds People se ha querido conocer desde el ángulo de las entidades españolas, cómo valoran las medidas tomadas.

“Después de los obstáculos que ha encontrado el BCE para sacar adelante un QE ambicioso a la europea”, señala Mutuactivos, “el hecho de que finalmente haya podido salir adelante y en las condiciones anunciadas nos parece claramente positivo”.

Esta valoración positiva se basa en dos razones, concretan: el hecho de que las compras no estén limitadas, ya que Mario Draghi ha dejado la puerta abierta a continuar con el programa más allá de septiembre de 2016 en caso necesario y, en segundo lugar, porque representa una decidida apuesta por impulsar el crecimiento en la zona euro. Por otro lado, destacan que se haya despejado las incertidumbres realizando una descripción clara de cuánto se comprará, qué tipo de activos, etcétera.

Otros aspectos positivos a tener en cuenta por Mutuactivos son, por un lado, la cantidad anunciada (que supera ligeramente las previsiones) y, por otro, la rebaja de las condiciones de financiación de los TLTRO, que siguen en activo, y que pasarán a tener un tipo de financiación del 0,05%, frente al 0,15% anterior.

Desde el punto de vista de Ibercaja, resaltan que el programa anunciado por el BCE realmente es “más de lo que esperaba el mercado”. Asimismo, creen que tiene un amplísimo potencial ya que, si se comprasen activos en proporción a la cuota de cada país, a España le corresponderían compras de deuda de 150.000 millones en año y medio, una cantidad superior a lo que emitió el Tesoro a dos años o más en todo 2014.

Por el momento, apunta Ibercaja, la respuesta ha sido la esperada (subida de la bolsa, caída de las rentabilidades de la deuda -en especial de países periféricos- y depreciación del euro). Un escenario que, desde su perspectiva, “debería consolidarse a medio plazo”.

Un aspecto menos favorable es para Mutuactivos la responsabilidad sobre la que van a recaer las compras de deuda efectuadas, ya que Mario Draghi ha anunciado que el riesgo de un 80% de las adquisiciones correrá a cargo de los bancos centrales de cada país y sólo un 20% recaerá sobre el BCE. “Los países periféricos son los que se pueden ver más afectados por esta decisión”, resaltan.  

Renta variable, activo favorito 

Al margen de esto último, Mutuactivos destaca que el contexto actual de elevada liquidez y de mejores expectativas de crecimiento económico, es beneficioso para los activos de riesgo. En concreto, creen que la bolsa se presenta como una de las alternativas de inversión más atractiva, junto con los bonos corporativos, especialmente financieros.

Comparten la misma visión desde Ibercaja, que detalla como en un escenario de rentabilidades en mínimos históricos por la presión de las compras de bonos por parte del BCE, el euro debería continuar su tendencia depreciatoria por la divergencia en el tono de políticas monetarias en ambos lados del Atlántico.

En esta situación, los analistas de Banco Madrid creen que el impacto positivo sobre el euro beneficiará a los sectores industriales, energía, bienes de consumo, ocio, farma y sectores exportadores en general y con exposición internacional.

Un entorno de tipos bajos (reducción de los costes financieros de las empresas), depreciación del euro (mejora precios exportación de empresas europeas) y caída del precio del petróleo (disminución costes de producción), resume Ibercaja, “va a impulsar de forma importante pensamos los beneficios empresariales”, viéndose beneficiada la renta variable.

Banco Madrid apoya esta idea ya que considera que la experiencia de programas cuantitativos por parte de otros bancos centrales, como los llevados a cabo por la Reserva Federal americana, han demostrado que suponen un balón de oxígeno y sustento para los mercados, en un entorno de liquidez abundante, petróleo barato y tipos bajos, que se trasmitirá a los diferentes activos, incluso los de mayor riesgo.

En cuanto a la volatilidad, Banco Madrid espera que dentro de los efectos del QE se de un entorno de volatilidad baja, “lo que generará confianza durante un periodo largo de tiempo”. Asimismo, recalcan que habrá tiempo para que los distintos Estados de la UE continúen trabajando para ajustarse y entrar de una forma más saneada en un periodo de recuperación económica. Finalmente, al considerar que el programa debe ser capaz de generar crecimiento económico y por tanto, inflación, piensan que “en los próximos meses iremos saliendo poco a poco del entorno deflacionista de los últimos meses y evitaremos los efectos negativos de la misma sobre los países más endeudados”.

Puntos a destacar por parte de Bankia 

Según la entidad, "se envía una señal a los países con rating inferior al de inversión y sujetos a un programa de apoyo internacional, al advertir que quedarían automáticamente excluidos del QE si suspenden el examen de la troika o si se plantean el incumplimiento de los mismos".

Además, creen que la positiva reacción del mercado, influirá en la cotización del euro en los próximos meses (con posibilidad de acercarse a la paridad) y en el comportamiento de los activos de riesgo. Por tanto, "seguimos pensando que además de cambiar las expectativas de inflación, el principal objetivo del BCE es debilitar el euro", comentan.

"Dudamos más de la efectividad directa de la medida sobre el crecimiento, a través de un cambio de la estructura de balance del sistema financiero. Pero, desde luego, lo que no va a hacer es perjudicar", concluyen.