Según Matt Shafer, director general de distribución de Natixis Global AM, históricamente la industria no lo ha hecho bien a la hora de debatir con sus clientes sobre cómo deben estar construidas sus carteras y ha preferido centrarse en el producto.
Durante los últimos tres años, en Natixis Global AM han estado haciendo un especial esfuerzo en hablar con sus clientes sobre la importancia de aplicar un enfoque de inversión basado en el riesgo a través de la construcción de carteras que permitan establecer objetivos a largo plazo. Lo que buscan es resaltar la importancia de invertir con la vista puesta en cumplir estos objetivos de inversión y acompañarles en el proceso para que no pierdan esto de vista en momentos de volatilidad e incertidumbre. Esto no siempre es fácil. Según un reciente estudio realizado por la entidad entre 150 asesores españoles, el 73% considera que dejarse llevar por las emociones es el principal error que cometen los inversores individuales. Junto a este, el enfoque en el comportamiento a corto plazo del mercado (69%) y la ausencia de plan financiero (59%) son otros errores comunes de los inversores españoles.
Según Matt Shafer, director general de distribución internacional de Natixis Global AM, momentos como los que estamos viviendo actualmente en los mercados muestran la necesidad de evitar todos estos sesgos conductuales a la hora de invertir. “La construcción de la cartera se ha vuelto hoy más relevante que nunca. Ahora los clientes están mucho más dispuestos a discutir sobre cómo construir carteras a largo plazo. Lo importante es poner el riesgo en primer lugar y eliminar las emociones de la ecuación”, asegura el experto en una entrevista concedida a Funds People. En este sentido, Shafer se muestra muy crítico con el enfoque general de la industria, centrada básicamente en producto. “Históricamente, el sector no lo ha hecho bien a la hora de debatir con sus clientes sobre el modo en el que están construidas sus carteras y ha centrado las conversaciones en el producto”.
Ese vacío detectado por la entidad hizo que hace cuatro años la gestora construyese un Grupo de Investigación y Consulta de Carteras (Portfolio Research and Consulting Group), cuyo fin era proporcionar a los clientes información detallada sobre cómo están configuradas sus carteras en términos de correlaciones, volatilidades o diversificación. El objetivo último era mostrarle al cliente dónde estaban las ineficiencias y darle una respuesta sobre qué clase de activos debería incluir para su optimización según el binomio rentabilidad/riesgo, siendo agnósticos en cuanto a producto y realizando dicha labor de manera confidencial e independiente del centro de ventas. A tenor del gran número de solicitudes recibidas tanto en sus centros de Boston y Londres –entre los que se reparten los 35 integrantes del equipo- el éxito que ha tenido ha sido arrollador.
“Los riesgos que existen actualmente en los mercados son mayores que nunca y las carteras no siempre están bien diversificadas. A veces se cree que tener cuatro estrategias de bolsa europea en la cartera te permite tener una buena diversificación, cuando en realidad la correlación suele ser muy alta. En cambio, en fondos de retorno absoluto, donde existe una mayor dispersión en los resultados entre las distintas estrategias, los clientes apenas tienen uno o dos productos en cartera. Un buen ejercicio es analizar cómo con la incorporación de estrategias alternativas a la cartera, la volatilidad disminuye. El 60% de las conversaciones que mantenemos con nuestros clientes giran en torno a las inversiones alternativas. Hemos dedicado muchos recursos a educar a los clientes sobre la importancia de incorporar estas estrategias a las carteras. Nuestro rol debe ser el de educar”, indica.
El director general de distribución internacional de Natixis Global AM asegura que educar a los ciudadanos a cumplir sus objetivos de cara a la jubilación es uno de los grandes desafíos que encara la industria, un problema global que alcanza a todos los países. Pero no el único. Afrontar el nuevo escenario regulatorio es otro tema muy candente en la industria de gestión de activos. Para hacerle frente, el experto apuesta por no ser reactivos, sino trabajar de la mano de los reguladores para que el nuevo marco normativo sea el más adecuado para los fines a los que sirve la industria de gestión de activos. También la digitalización es otro de los grandes retos que afronta el sector, sobre todo en lo que respecta a los millenials. “Necesitamos encontrar maneras de estar cerca de las nuevas generación, a través por ejemplo de apps que te permitan interactuar con ellos. La industria no puede vivir al margen de lo que supone el relevo generacional”, concluye.
Para Shafer, el riesgo significa muchas cosas. “Es hablar del riesgo de la cartera, de las correlaciones, de la protección en periodos de caída de los mercados… Ahora tenemos herramientas que nos permiten ofrecer esa información a nuestros clientes de manera que les sea útil”. El nivel de detalle que le aportan en el estudio es muy alto y la concreción con la que se realiza aporta al cliente una gran información. Sobre la base de cuál es el objetivo para el que está configurada cada una de las carteras (volatilidad, máxima caída esperada…), lo que hace el Grupo de Investigación y Consulta de Carteras es estudiar cómo está estructurada cada una de ellas. El grupo hace los análisis que le piden los inversores de manera gratuita. A la entidad esto les obliga a ser más flexible y hacer un trabajo muy pormenorizado, cliente por cliente, ya que los objetivos de inversión no son los mismos para todos.