El nuevo director de Inversiones de Imantia Capital tiene como objetivo consolidar el área de renta fija, potenciar los perfilados y reestructurar el área de renta variable.
Tras haber identificado los puntos fuertes y débiles de la antigua Ahorro Corporación Gestión, ahora Imantia Capital, el director de Inversiones de la gestora perteneciente a Abanca, Iñigo Colomo, tiene muy claro cuál es su cometido en esta entidad.
En resumen, sus objetivos son consolidar lo que hacen bien, el área de renta fija; potenciar lo que también gestionan bien, pero está claramente por debajo de su potencial, los fondos perfilados; y reestructurar el área de renta variable, donde antes no había un mandato claro. Imantia tiene un enorme potencial que va más allá de gestionar productos de renta fija.
En renta variable es donde más empeño ha puesto Colomo en sus primeros seis meses en la entidad. La primera de las soluciones ha sido reforzar el equipo con Juan Llona, que se une al equipo de renta variable que también conforma Jaime Espejo. La nueva incorporación asumirá la responsabilidad directa del fondo ibérico y Espejo la gestión del fondo europeo.
Queremos un estilo basado en la convicción de las ideas, independientemente de las etiquetas al uso de “value”, “growth”, etc. Un enfoque de convicción traducido en carteras concentradas donde de verdad se refleje la gestión activa, explica, con decisiones que se separen del consenso y tengan impacto, añade. Por ejemplo, su fondo ibérico, girará en torno a las 25 compañías.
Simultáneamente se ha lanzado una de las nuevas apuestas de la casa, su fondo de gestión pasiva indexado al Ibex 35 con las comisiones más baratas del mercado que llevará Espejo, especialista también en fondos índice.
Con este salto a la gestión pasiva, Colomo quiere dejar claro que un tipo de gestión y otra no son contradictorias. El director de Inversiones no cree que el enemigo esté en la gestión pasiva, sino en la que se disfraza de activa. “Donde no hay valor es en esta ultima”, determina.
Desde la firma están abiertos a crear productos con sentido. “No nos podemos permitir tener tanto fondo si el cliente no lo necesita”, justifica. En función de la aceptación de la nueva estrategia pasiva, piensa que el salto natural sería lanzar uno similar, pero europeo.
Renta fija
Aunque sea el área más consolidada, Colomo también es consciente que tienen un reto importante en este activo. “Casi todo lo que sabíamos hasta ahora hemos tenido que repensarlo”, señala. Desde su punto de vista, el cliente va a tener que aceptar un nivel de riesgo superior, pero cómo perfilarse es una decisión que le compete a él.
Como alternativa al fondepósito, su más claro ejemplo de tener un fondo diseñado con un mandato claro, proponen su renta fija corto plazo y el renta fija flexible. Hace poco, este último absorbía al bonos financieros, un producto que tuvo su momento, reconoce. “Nuestro deber es decirle al cliente que ya pasó el momento de invertir en deuda financiera española y llevarle a otro lado donde vemos más oportunidades”, indica.
Nuevas incorporaciones
Por otro lado, no descarta que haya nuevas incorporaciones al equipo en un futuro. “Creo que hay talento en el mercado español, hay que escucharlo y tantearlo”, destaca.