Principales razones para invertir en Private Equity

Entrevista a Matilde Horta e Costa, Directora, Private Equity

La inversión en Private Equity permite obtener exposición a compañías no cotizadas, generalmente inaccesibles para la mayoría de los inversores. 

Los fondos tienen una variedad de recursos a su disposición para impulsar el crecimiento de estas compañías, ya que cuentan con equipos con amplia experiencia y con buen conocimiento de sus mercados objetivos, y están apoyados por una base de capital para financiar iniciativas de crecimiento.

Otra característica de estas empresas es la iliquidez de estos activos y el modelo de inversión con horizontes de medio-largo plazo. El mundo del Private Equity está menos expuesto a la inestabilidad de los mercados públicos a corto plazo, lo cual permite al gestor centrarse en la gestión de las empresas e impulsar la creación de valor.

El Private Equity ha demostrado ser muy resistente y ha generado retornos atractivos, particularmente en periodos post-crisis. Los gestores han centrado sus estrategias de creación de valor más en el ángulo operativo y menos en el apalancamiento de las compañías o el arbitraje de múltiplos de compra y venta. 

El aumento de la volatilidad de los mercados públicos ha llevado a los inversores a considerar cada vez más la incorporación de estas inversiones, dada la baja correlación con el comportamiento del mercado. Al incorporarlo, los inversores han visto reducida la volatilidad general de sus carteras, obteniendo retornos atractivos y sirviendo de cobertura contra la inflación y la caída de valor de los activos tradicionales.

Varios estudios han demostrado que los retornos de los mercados privados han superado a los mercados públicos en horizontes de 5, 10, y 20 años.

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