Special situations: capacidad de valor a través de las transformaciones empresariales
La nueva legislación española de reestructuraciones ha generado un marco legal tremendamente dinámico para favorecer la rápida reestructuración de empresas en problemas.
COLABORACIÓN de Yaukuma Armbruster, partner en Quantum Capital.

Llevo aproximadamente 25 años dedicándome a la valoración y transformación de empresas en Europa y América, y en todo este tiempo nunca he visto un entorno tan favorable para mi actividad como el que observo ahora en el mercado de la Península Ibérica. España y Portugal, con bases legales y económicas muy similares, están viviendo momentos únicos para la inversión.
En España la economía está mejorando sus propias previsiones y presenta un entorno con muchas oportunidades. El PIB ha crecido un 3,2% en 2024, el crecimiento más rápido de la UE y la OCDE, y nuestro mercado laboral está en un momento dinámico con desempleo a la baja. Con una renovada legislación para fomentar las inversiones y las reestructuraciones, alcanzando el liderazgo mundial en turismo, con una planta de generación energética aislada de los shocks que han castigado a otros países del norte de Europa, y con suministros energéticos a precios asequibles, parece claro que actualmente hay vientos de cola adecuados para nuestro país, pero que a la vez muchos en España no se lo terminan de creer.
Como muchos inversores, viajo por toda Europa de manera habitual y conozco las peculiaridades de sus principales mercados. Y actualmente percibo un entorno ideal para aquellos inversores que sepan identificar el potencial escondido de compañías de lo que generalmente se ha llamado special situations. Esto es una modalidad de private equity en la que creemos firmemente por su capacidad para multiplicar el valor a través de las transformaciones empresariales. Un ejercicio al que nos dedicamos desde hace años y que permite multiplicar por muchos múltiplos el valor que tiene una empresa.
En España, el campo de acción que tenemos es grande, porque hay una altísima ratio de pequeñas y medianas empresas por habitante. El mercado es dinámico, con más de 70 operaciones de private equity de medianas empresas que se cierran al año. Pero queremos que lo sea mucho más.
Inversión value y buena regulación
La filosofía de inversión value consiste en identificar por qué una compañía no tiene valor en este momento, y cómo con creatividad y capacidad operacional para llevar a cabo transformaciones, puede mejorar y obtener rendimientos muy importantes. Y es una alegría poder decir que actualmente España tiene un marco regulatorio –establecido en 2022- muy competitivo para fomentar el ecosistema de empresas emergentes (ley de start-ups) y para llevar a cabo reestructuraciones de forma rápida (ley de reestructuraciones empresariales). En países como Alemania, se valora el entorno regulatorio español más de lo que nos podríamos imaginar.
La nueva legislación de reestructuraciones ha generado un marco legal tremendamente dinámico para favorecer la rápida reestructuración de empresas en problemas, y esto hace que España sea ahora mismo mucho más atractiva para la actividad de los inversores transformadores de lo que venía siendo hace unos años. De hecho, probablemente tengamos ahora el marco legal más dinámico y competitivo de toda Europa para nuestra actividad, incluyendo en esta comparación al Reino Unido.
Desde mi punto de vista, la nueva ley de reestructuraciones española es como una caja de herramientas de la que puedes escoger en cada momento qué utensilio utilizar. Son las reglas de juego que necesitábamos para incrementar nuestra actividad en el mercado español.
Como inversores de transformación, para nos interese una compañía que esté en una fase de peligro de insolvencia, ésta debe reunir algunos de los siguientes requisitos: tamaño suficiente, sector que nos parezca atractivo, con dinámicas positivas y que creamos que las habilidades profesionales que reunimos se adaptan a las necesidades de transformación de la empresa.
Nuestro objetivo al invertir es salvar compañías y hacer que vuelvan a resurgir con fuerzas renovadas, lo cual tiene una repercusión clarísima sobre el empleo y sobre la actividad económica general. Además, muchas veces las empresas transformadas y salvadas pertenecen a entornos donde su actividad es muy relevante, lo cual sirve para anclar empleo y oportunidades en lugares que no son necesariamente metrópolis.
Ofertas que generen valor
Acceder a información sobre la situación de una empresa en dificultades es uno de los elementos clave a la hora de poder presentar una oferta que valore convenientemente esta sociedad o alguna de sus unidades productivas Siempre se requiere un análisis profundo con capacidad para implementar cambios operativos, y que haya una visión clara de cómo reposicionar a la compañía con éxito, realizando esta transformación empresarial que es el core de nuestra filosofía empresarial y de inversión.
Una de las disciplinas más importantes es la de los carve-outs, en donde divisiones de multinacionales que pueden ser rentables pero que no forman parte de la estrategia de sus grupos, necesitan discontinuarse por presión de accionistas o acreedores. Esto genera una oportunidad para la actividad de private equity.
Cuando obtenemos el control de las compañías, aplicamos el sentido común: ver qué proveedores es imprescindible mantener, qué líneas de negocio continuar y cuáles no.
Algunos casos de éxito en la transformación de empresas y generación de valor han sido la compañía jienense Clarton Horn, la tecnológica madrileña Eltec, la barcelonesa Cartonboard o la vallisoletana ALA. Con todas ellas se cumplió el objetivo de salvar la empresa -y por tanto, la mayor parte de su empleo- reposicionarla, hacerla de nuevo rentable gracias a líneas de negocio nuevas, y venderla a un grupo multinacional por un interesante múltiplo.
Un 2025 ilusionante
Afrontamos un año 2025 de ilusión, con un mercado ibérico en auge donde abundan las oportunidades para que sigamos haciendo lo que sabemos hacer. Nuestro objetivo es seguir identificando y transformando compañías con alto potencial de desarrollo. La inversión en organizaciones en situación especial no solo genera rendimientos atractivos, sino que también contribuye a fortalecer el tejido empresarial local, fomenta la creación de empleo y apoya la estabilidad económica. Este tipo de inversiones tiene un impacto que va más allá de los retornos financieros, promoviendo la innovación y el desarrollo empresarial.