La gestora ha encontrado oportunidades muy interesantes en el sector a raíz de la crisis de Credit Suisse. Por otra parte, está incrementado una estrategia de compresión de spreads en las carteras de deuda.
La gestora muestra un posicionamiento muy defensivo en sus carteras, en las que la renta fija tiene un rol protagonista. “La renta fija ya es una opción muy interesante y está formando parte del núcleo duro de nuestras inversiones en estos momentos”, ha afirmado José María Lecube, director de renta fija de Dunas Capital. Uno de los sectores donde están encontrado oportunidades es el financiero.
"La crisis de Credit Suisse ha generado oportunidades interesantes en deuda financiera. Las necesidades de emisión por parte de las entidades financieras está generando oportunidades, las entidades están pagando unos spreads muy interesantes", ha contado. Así, han aumentado fuertemente su exposición a crédito financiero, especialmente senior, que ha elevado su rating medio hasta BBB.
Tras un 2022 en el que comenzaron con duraciones negativas, a medida que se han ido normalizando los tipos han ido incrementando las duraciones de tipos a niveles de 1 año en Dunas Prudente y de 2,25 años en el resto de la gama. Por otra parte, han aumentado la exposición a bonos de Estados Unidos.
Según ha contado, están implementando una estrategia de compresión de spreads: “En la medida en que van subiendo los tipos de interés, capturamos la rentabilidad de los bonos de renta fija privada, vendiendo parcialmente gobierno y comprando crédito. Vamos subiendo duración en la medida que suben las curvas de tipos con coberturas de opciones de renta variable”, ha comentado Lecube.
Posicionamiento cauto en bolsa
En la parte de renta variable, el posicionamiento de la firma es cauto debido a su análisis Cross Asset. “Esto no quiere decir que no tengamos renta variable, pero por esas coberturas hacen que la exposición sea muy baja”, ha reconocido Carlos Gutiérrez, responsable de renta variable.
Una posición de 25 empresas fundamentalmente defensivas. Negocios sólidos con generación de caja como el sector farmacéutico, petroleras integradas, utilities o telecos. “Hemos salido de sectores que pueden salir malparados si hay una recesión”, ha admitido. Entre ellos están el de autos, 5G y redes de distribución de energías españolas.
Por su parte, en la parte de activos alternativos, en diciembre acaba el periodo de comercialización de Dunas Absolute Impact y Dunas Clean Energy. Siguen comercializando el fondo de energía renovable y mirando posibles opciones, pero "no queremos sacar fondos todos los años, sino cuando verdaderamente aporten valor a los inversores", ha avisado Alfonso Benito, CIO de la gestora.
Racionalización de la gama
La gestora ha experimentado un fuerte crecimiento en los últimos tres años que le ha llevado a superar ya los 2.000 millones en activos bajo gestión. A los que si se suman los activos ilíquidos hacen un total de 2.500 millones. Entre los grandes cambios de los últimos meses está la racionalización de su gama de productos. “Hemos realizado fusiones de fondos porque el mercado nos lo pedía y las subidas de tipos también”, ha reconocido David Angulo, presidente de Dunas Capital.
Desde sus inicios han defendido siempre su vocación de preservar el capital de sus clientes. No obstante, esto no está reñido con la rentabilidad. “Buscamos ser la gestora de confianza de los inversores, con una gestión patrimonialista, pero con el objetivo de ganar dinero”, ha dicho Benito. Con una gama centrada en el retorno absoluto, consideran que la flexibilidad es fundamental para poder aprovechar las oportunidades del mercado. Una gestión en la que la macro y la micro importan y se tienen muy en cuenta.