Los resultados de la renta fija y la bolsa de fuera de la zona euro compensan las pérdidas provocadas por las inversiones en renta variable euro.
Los fondos de pensiones españoles tuvieron un buen comportamiento durante el mes de junio, en el que lograron una rentabilidad mediana del 1,6%, lo que ayudó a que en el semestre las ganancias ascendieran hasta el 4%, según muestra una estimación basada en el Informe PIPS (Servicio de Medición de Rendimientos de Fondos de Pensiones) desarrollada por Mercer.
La cifra de junio se debe en gran medida a la renta variable euro y a la renta variable no euro, que obtuvieron unas rentabilidades de un 7,3% y un 2,2%, respectivamente. Estos datos positivos compensaron el de la renta fija, que tuvo en junio un rendimiento negativo del 0,5%.
En cuanto a la rentabilidad acumulada en los primeros seis meses del año, la cifra se sitúa en el 4%, mientras que a 12 meses se modera hasta un 1,7%, debido a la tendencia negativa de la renta variable euro, que en un año ha perdido un 15,1%. Sin embargo, la renta fija y la renta variable no euro equilibran a la anterior, con rentabilidades del 6,4% la primera y del 6,9% la segunda, lo que provoca el cierre en positivo del total a 12 meses.
La muestra de los fondos de pensiones españoles proviene en su gran mayoría del sistema de empleo y en ella participan los principales fondos de pensiones y entidades gestoras nacionales, los cuales representan un patrimonio superior al 50% del patrimonio de los fondos de pensiones de empleo de España.