Manuel Arroyo, de JP Morgan AM: “Todo estaba en la hoja de ruta”

“No ha pasado nada con lo que no contáramos: todo estaba en la hoja de ruta”, comenta Manuel Arroyo, director de estrategia de J.P. Morgan AM para España y Portugal, con respecto a lo ocurrido los últimos meses en los mercados. “La volatilidad se debe a riesgos estructurales con los que ya contábamos y nuestras carteras están posicionados para hacerlos frente”, asegura, haciendo referencia a riesgos como la delicada situación del mercado inmobiliario y laboral en EEUU –el número de contrataciones no basta para mantener la tasa de paro en sus niveles actuales-; la inflación en China –“que se les está yendo de las manos a las autoridades y hace prever una continuación de las políticas de aumento de tipos y restricciones a los bancos, si bien la inflación debería retroceder en los próximos meses aunque sólo sea por motivos técnicos”-; el debate sobre el techo de deuda en EEUU –que previsiblemente aumentará para aportar tranquilidad a los mercados pero que muestra el cada vez menor magen de maniobra de las autoridades estadounidenses ante la instauración de una política de austeridad fiscal y la falta de inflación que justifique un nuevo QE3- y, especialmente, el problema griego.

Incluso Arroyo hace una lectura positiva del reciente anuncio de rescate al país heleno, en la medida en que se está avanzando en la dirección correcta y las administraciones, hasta ahora no demasiado activas, “dieron por primera vez una sorpresa positiva por su envergadura de medidas y objetivos”. Aunque el experto matiza que aún es pronto para verse los detalles sobre cómo se reducirá el nivel de deuda, cómo serán las ayudas o cómo obtendrán financiación los bancos griegos si todo se cataloga como default, considera positivo que países como España puedan beneficiarse de la decisión, pues su sistema financiero podrá financiarse de forma más barata y bajo una menor presión. “Lo ocurrido se traduce en volatilidad en las carteras, pero la lectura de los mercados está siendo positiva”, comenta. Una volatilidad que se mantendrá en agosto, al ser un mes con menor liquidez y volúmenes de contratación más bajos.

La gestora, que considera que los riesgos están dentro de la hoja de ruta prevista y ya ha posicionado sus carteras para aprovechar el rebote esperado de cara a los próximos meses,  es positiva con la situación económica y los mercados, razón que explica su apuesta por los activos de riesgo. Así, sus niveles de sobreponderación en renta variable son los mayores en varios años, especialmente en el mundo emergente (en países como China, Brasil, Turquía y otros países asiáticos) y en Estados Unidos, mientras en renta fija se decanta por la deuda la corporativa, sobre todo de alta rentabilidad –si bien también es positiva con la deuda pública emergente en divisa local-, y por el universo de bonos convertibles, que permite beneficiarse de las subidas bursátiles con menor volatilidad.

Por ello, y aunque Arroyo matiza la situación indicando que “ahora existe un mayor equilibrio entre pesimistas y optimistas” frente a unos meses dominados por los compradores, confía en una recuperación de los mercados bursátiles sustentada en la agresiva recuperación de Japón, la reciente corrección de las materias primas, las actuales condiciones de política monetaria -con bajos tipos y subidas que sólo forman parte de un proceso de normalización-, el crecimiento alemán y sobre todo, la positiva situación empresarial frente a un débil sector público, además de unas atractivas valoraciones.

Al traducir sus perspectivas en fondos, destaca la apuesta de la gestora por fondos flexibles y distribuidores de rentas en contraposición a la concepción tradicional del fondo como vehículo de acumulación. Por ejemplo, con el JPMorgan Income Opportunity, un fondo que emplea diferentes estrategias en los mercados de renta fija y divisas, o el JPMorgan Global Income, un fondo global y mixto gestionado desde el punto de vista de la obtención de las mayores rentas posibles. Y, en renta variable, con el Europe Strategic Dividend, un producto que invierte en empresas europeas con altos rendimientos. También dentro del universo bursátil, apuesta por dos productos de Highbridge, la gestora alternativa del grupo (uno en EEUU, el Highbridge US Steep Fund, y otro en Europa, el Highbridge Europe Steep Fund). Y por último, destaca el JP Morgan Global Convertibles.