El dilema macroeconómico del 2009

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Es evidente que la presente crisis ha desbordado a los sabios más prominentes, y, junto a ellos, a los Institutos Económicos y Bancos Centrales más prestigiosos. Haciendo honor a la verdad, ni tan solo uno de ellos vio venir la crisis ni la severidad de su impacto a nivel mundial. Como es natural, se cierne sobre el Sistema Financiero una gran incertidumbre. Las pérdidas mundiales son simplemente “descomunales”.

Pero en el año 2008, no solo se ha visto afectada la economía real, sino también el espíritu doctrinal que la dirige. A pesar de lo negativo de todo ello, la presente crisis presenta aspectos novedosos, “revolucionarios”, sobre el comportamiento de la economía mundial. El ajuste generalizado y acompasado en mercados financieros y variables macroeconómicas muestra, por la vía más pragmática posible (la propia realidad), la intensa interrelación económica mundial existente. Se puede afirmar que la economía mundial esta interrelacionada y es interdependiente. Es más, en el campo financiero, ha sido fácil observar como los valores de incontables activos financieros de un lado al otro del planeta, de algún curioso modo, se han ido ajustando en el tiempo en términos relativos (a excepción del precio del dinero). Esta importante evidencia pragmática nos lleva a algo sencillo: el mundo es redondo y la economía también. Los precios se comunican y ajustan en términos relativos. Curiosamente, toda esta evidencia, tan perceptible en la actualidad en el campo financiero y macroeconómico, es contraria a postulados básicos del pensamiento económico Neoclásico, soporte intelectual del sistema económico vigente. En fin, la crisis actual no solo esta desbordado la tradicional política económica occidental, sino también al pensamiento económico que subyace. Todo un nuevo gran reto a futuro.

Perspectivas económicas mundiales 2009

Las perspectivas económicas mundiales para el 2009, no son optimistas. Los datos que aparecen en el informe del Banco Mundial “Global Economic Prospects”, no dejan lugar a dudas, la crisis se profundizará seriamente durante el año 2009, entrando en recesión casi la totalidad de las primeras economías del mundo. El comercio mundial en volumen caerá drásticamente y la inflación se mantendrá baja en los países desarrollados. El escenario descrito del Banco Mundial muestra una clara situación de deflación en las economías más desarrolladas. En el año 2010 la situación mejorara, según Banco Mundial.

Por el contrario, el análisis de los datos 2009 sobre crecimiento económico de naciones emergentes -Asía, América Latina, Este Europeo- muestra una caída generalizada del PIB, pero en un entorno de inflaciones mucho más elevado que en las naciones desarrolladas. Estas elevadas inflaciones derivan de la crisis de los precios de la energía y alimentos del primer semestre 2008. Las previsiones de inflación del FMI sugieren que se espera que las economías en desarrollo mantengan inflaciones elevadas durante el 2009, o bien no se produzca la caída vertiginosa que están acusando las economías en desarrollo. Así, las economías emergentes y periféricas podrían estar entrando en un estado conocido como “estanflación” o altos niveles de inflación con bajos crecimientos económicos. Dicho sea de paso, la estanflación es un brioso y difícil estado económico y su manejo y corrección compleja.

El dilema macroeconómico del 2009

Ante el escenario de deflación que se avecina, los Gobiernos de las economías más desarrolladas están poniendo sus esfuerzos en dos tipos de políticas: a) fuertes paquetes de inversión pública que frenen el deterioro económico (el retorno a Keynes); b) el aumento de la masa monetaria. El presidente de la Reserva Federal, Bernanke, ha sugerido recientemente la flexibilización cuantitativa de la política monetaria (“quantitative easing” ) …..en clara alusión a un posible aumento de la masa monetaria a fin de prevenir una deflación en USA.

Pero ¿qué consecuencias se derivarán de estas políticas?. Existen evidencias empíricas de que el aumento del déficit público (disparado en USA y se disparará en todas las economías occidentales) da lugar a aumentos en el nivel de precios. A un aumento de un 1% en el déficit público la inflación aumenta entre a 0.20% a 0.70% (varia según países). Asimismo, existen evidencias empíricas de que el aumento de la masa monetaria da lugar a aumentos en el nivel de precios. A un aumento de la de un 1% en la masa monetaria la inflación aumenta alrededor de 0.20% -0.40% (según países).

La inflación es una variable macroeconómica curiosa. La puedes producir domésticamente (para consumo propio), o bien importar de fuera sin consentimiento y con coste (pérdida de competitividad). Así, y por lo expuesto cabe preguntarse: ¿tendrá efecto la subida de la inflación de los países desarrollados en el nivel de precios de las economías emergentes y en su estado de crecimiento económico?. El gráfico de dispersión adjunto, señala la existencia de una estrecha relación entre inflación y crecimiento económico. Si aumenta la inflación de un país (aumenta negativamente la inflación diferencial relativa) el crecimiento económico decrece, y vicecersa. Así, a distintos niveles de inflación, distintos estados de crecimiento económico para cada país.

Si la inflación aumenta en exceso en las economías más desarrolladas como consecuencia de la expansión monetaria y el excesivo déficit público, sin duda, se avanzará con rapidez a una situación de estanflación para estas economías, pero, lamentablemente, todo ello efectará a las economías emergentes y en su estado de crecimiento económico.

1.- Comercio mundial. A aumentos importantes en los niveles de inflación, las monedas de los países occidentales tenderán a depreciarse a nivel mundial (US$, Euro, Libra…). Dado que las economías desarrolladas son los principales importadores del mundo (excepción China), la menos ventajosa posición relativa de tipo de cambio frenará las importaciones y, en definitiva, el comercio mundial se contraerá aún más, con efecto directo en el PIB de las economías emergentes.

2.- Commodities. La pérdida de poder compra de las monedas más importantes, elevará los precios de las commodities (especialmente energía y oro). La relación entre poder de compra del dólar y petróleo, es bien conocida. Asimismo es bien conocido que la subida del precio de las commmodities (especialmente petróleo) afecta de manera directa la inflación a nivel mundial, siendo la elasticidad (sensibilidad) de las economías emergentes mucho más elevada que la de las economías desarrolladas.

3.- Mercado financiero. El posible escenario de caída de la producción en un entorno inflación creciente en las economías emergentes, forzará la existencia de fuertes devaluaciones (Bielorusia 20% la semana pasada). Dichas devaluaciones, propiciarán mayores subidas de precios a corto plazo en dichas economías….¿Se arriesgarán los inversores internacionales a continuar en dichos países?. Posiblemente no. Como en Islandia, saldrán en estampida. Se podría asistir a defaults de la deuda exterior. ¿Tendrá el FMI recursos suficiente para cubrir las insolvencias temporales de un número elevado de países ? (de momento Islandia, Bielorusia, Latvia, Hungría….).

La futura situación de los países emergentes podría complicar la recuperación de todo el sistema económico y financiero. ¿Existen medidas adicionales como precaución…. ?. Tal vez si. Tal vez sería deseable estabilizar, temporalmente, la totalidad del sistema monetario mundial.

1.- Paridades fijas a nivel mundial. Establecimiento de paridades fijas a nivel mundial (todas las monedas existentes), por un periodo transitorio (posiblemente de al menos 36 meses). 2.- Masa Monetaria mundial. Control estricto de la masa monetaria mundial durante dicho periodo en todos los países (no aumento de la misma). 3.- Países en deflación (desarrollados). Los tipos de interés en los países desarrollados deberían ser nominalmente cero, y en términos reales negativos. 4.- Países en estanflación (emrtgentes). Los tipos de interés en las economías emergentes y en desarrollo deberían ser nominalmente positivos, y en términos reales cero.

El no aumento de la masa monetaria de las economías occidentales forzaría a que la crisis sea algo más dolorosa en occidente. En cualquier caso:

a) sería un mal necesario para que el sistema de paridades fijas sea justo y creíble económicamente hablando;

b) trasladar el mayor peso relativo de la crisis a las economías emergentes (desempleo y pérdida de riqueza) no parece muy razonable. Es verdaderamente difícil de justificar que responsabilidad tiene el pueblo de Islandia o Bielosusia…. en la desastrosa gestión bancaria y agencias de rating USA.

El año 2008 ha terminado. Pasara a la historia de la economía en un lugar destacado. Se esta iniciando un cambio. El 2009 lo profundizará.