Diana Piedrahita y Sergio Miguez, de Alternative Ratings, explican el papel de los FdF como palanca para la promoción de los de los objetivos ambientales y sociales.
COLABORACIÓN de Diana Piedrahita, Directora de Sostenibilidad y Sergio Miguez, CEO, Alternative Ratings.
Los mercados privados han experimentado un crecimiento meteórico durante la última década. Aunque se anticipa un crecimiento algo menor en el futuro, seguirán siendo un instrumento clave para canalizar recursos privados hacia las nuevas tecnologías y los negocios necesarios para alcanzar las metas climáticas, ambientales y digitales. En este contexto, los Fondos de Fondos (FdF) podrían contribuir decisivamente para que los inversores minoristas accedan a estos mercados con una diversificación amplia, facilitando así su democratización.
Sin embargo, ¿de qué tamaño es esta oportunidad?, ¿cuáles son los pros y contras?, y, ¿cómo están abordando estos vehículos la promoción de los objetivos ambientales y sociales?
En este artículo analizamos las necesidades de recursos en Europa, las características de los FdF desde la perspectiva del inversor minorista y del gestor de fondos (GP), y finalmente, cómo los más avanzados están integrando la sostenibilidad para cumplir con la regulación del Pacto Verde Europeo.
745.000 millones al año
En palabras de Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo, en su discurso del 15 de febrero pasado, la Comisión Europea estima que se necesitarán 620 mil millones de euros adicionales por año para financiar los objetivos ambientales y climáticos de Europa, y otros 125 mil millones de euros para la transición digital. El ecosistema de activos privados en Europa, medido frente al tamaño de su economía, es sólo una pequeña fracción (alrededor de una quinta parte) del estadounidense[1]. En consecuencia, conseguir 745.000 millones adicionales por año para financiar la doble transición (ecológico y digital) es un reto mayúsculo que no podrá realizarse sin la implicación de los Mercados Privados.
Los activos bajo gestión en Mercados Privados se estiman en $13,4 billones de dólares a nivel global[2], sin embargo, el número de fondos de fondos tan solo suponía el 5,7% del total de vehículos en 2022, con una disminución desde el 20% que representaban en el 2009.
Gráfico: Número de fondos en Mercados Privados por estrategia de inversión (izqd.) y participación de los FdF frente al total (dcha.)

Los FdF son vehículos de inversión que asignan su capital a una cartera diversificada de fondos en lugar de invertir directamente en los activos subyacentes (activos privados o no cotizados). Algunas de sus ventajas para los inversores minoristas son la rentabilidad esperada superior frente a otros activos; el acceso a fondos inaccesibles por los mínimos de inversión; una mayor diversificación (por gestor, estrategia, vintage y geografía), lo que tiende a minimizar el riesgo de pérdidas; y una gestión profesional en el proceso de selección. A nivel global este vehículo ha perdido fuerza en los últimos años, en gran medida por su mayor coste (doble capa de comisiones), el horizonte temporal más extenso al desplegar las inversiones (2-3 añadas) y, en general, por la falta de conocimiento de los inversores sobre esta especialidad de inversión.
El acceso de los inversores minoristas podría ser una fuerza disruptiva en el mercado de activos privados, tomando en parte el relevo de las instituciones, y representar una fuente de crecimiento a largo plazo. Sin embargo, este potencial de mercado no sale gratis, ni es para todos. Para los GPs implicará importantes inversiones en la comercialización ya que vender estos activos requiere primero “evangelizar” o educar a los clientes (y asesores). Además, deberán superar otros retos relacionados con la infraestructura tecnológica necesaria para gestionar el nuevo flujo de clientes de una manera eficiente y escalable. Por otra parte, la normativa del Pacto Verde Europeo presenta desafíos adicionales si los productos buscan promover la sostenibilidad.
Medición: reto adicional en los FdF
El mayor problema para implementar la normativa del Pacto Verde Europeo en los FdF de Mercados Privados radica en cómo demostrar efectivamente la promoción de los objetivos sociales y ambientales. La medición de sus KPI de sostenibilidad (y con ello, de sus Principales Incidencias Adversas o PIAS) se obtiene de las empresas donde se realizan las inversiones (activos subyacentes), y deberá ser unificada por cada GP. Como la cartera de un FdF tiene varios GPs y la fuente de la información no es primaria, la metodología de acopio y agregación diferirá entre ellos. En realidad, lo que vendría a ser una gran ventaja por la disminución del riesgo derivada de su amplia diversificación, acaba generando una gran disparidad de datos que dificulta su comparabilidad.
Tras haber realizado un análisis de los GPs de FdF de referencia en Europa, llegamos a la conclusión de que, en general, no se hace seguimiento de las PIAS, al no poderse aseverar, a día de hoy, el uso de unos estándares de congruencia de datos. Esto incluye también a GPs con equipos amplios de varias personas dedicadas exclusivamente a la sostenibilidad. A pesar de esto, los que son líderes en sostenibilidad están marcando el camino en su impulso de las inversiones sostenibles, mediante la elaboración de Due Diligence robustas focalizadas sólo en ESG, tanto a Gestores, como progresivamente también a las inversiones subyacentes, lo que debería generar un círculo virtuoso de alineamiento para facilitar el acceso a la financiación.
Por ello, sería muy deseable que el supervisor haga una aplicación “proporcionada” de la normativa de sostenibilidad que tenga en cuenta las particularidades de estos vehículos, cuyo acceso a datos es todavía incipiente, no existe estandarización y sus subyacentes no tienen obligación de reportar información de sostenibilidad conforme a la CSRD (Corporate Sustainability Reporting Directive).
En conclusión, los fondos de fondos podrían desempeñar un papel esencial en el aumento de la inversión de los clientes minoristas para la financiación de la transición ecológica y digital. Si Europa quiere cumplir con su gran meta de ser un continente neutro en carbono para 2050, la reglamentación del Pacto Verde Europeo no debería dificultar el despegue de la democratización en los Mercados Privados, y para ello, los FdF son posiblemente el vehículo más adecuado y pueden servir de palanca para promover esa transición.
[1] https://www.ecb.europa.eu/press/key/date/2024/html/ecb.sp24215_annex1~ed8f5b8121.en.pdf
[2] World Economic Forum (2023) https://www.weforum.org/agenda/2023/11/future-capital-markets-private-retail-investors/