TRIBUNA de Laure Peyranne, directora de Relación con Clientes de Amundi ETF para Iberia y Latinoamérica.
Los fondos cotizados constituyen una las innovaciones financieras de mayor éxito en las últimas décadas. El primer gran ETF, que replicaba al S&P 500, se creó hace veinte años, mientras que en 2014 los activos gestionados en el segmento ETF representan en torno a 2,4 billones de dólares a nivel global, invertidos en más de 3.200 fondos.
La innovación es una característica clave del mercado de ETF y ha constituido uno de los principales impulsores de su fuerte crecimiento en términos de activos gestionados. Esto es especialmente cierto para el mercado europeo de ETF, donde la cifra de activos gestionados era de 16.000 millones de dólares a finales de 2003, invertidos en 257 ETFs; que se ha incrementado hasta los 248.000 millones de dólares y 3.186 ETFs 10 años después; es decir un incremento de 17 veces. Los ETF abarcan en la actualidad todas las principales clases de activos y ofrecen a los inversores una amplia gama de exposiciones en múltiples divisas. ¿Pero, qué aporta a los inversores europeos la innovación en materia de ETF?
1) Usar de forma selectiva los índices existentes para ofrecer nuevas exposiciones
Un enfoque empleado en el sector ETF para crear nuevos productos ha sido la selección o la exclusión de componentes de los índices existentes.
Un inversor puede usar los ETFs para construir posiciones principales seleccionando productos que repliquen, por ejemplo, a los índices MSCI Europe, MSCI EMU o Eurostoxx 50. Estos grandes fondos satisfacen la necesidad de beta ‘plain vanilla’ a bajo coste para los inversores. Pero lo que hace que los ETF sean una valiosa herramienta de asignación de activos es la amplia diversidad de opciones disponibles seleccionando entre estrategias “satélite” o de diversificación. Ofrecen la flexibilidad para excluir un país, una zona o un sector en concreto del índice paneuropeo.
Por ejemplo, un gestor de carteras suizo, con una proporción importante de activos ya invertida en acciones suizas pero que busque ganar exposición a acciones europeas, podrá lograrlo por medio de un ETF con exposición al índice MSCI Europe. Como Suiza representa cerca del 14% de este índice, el inversor incrementaría la exposición en renta variable suiza de su cartera. Una alternativa sería seleccionar un ETF expuesto a un índice como el índice MSCI Europe excluyendo Suiza, beneficiándose así de la diversificación en renta variable europea pero sin incrementar su exposición en renta variable doméstica.
Los inversores podrán también decidir ganar exposición en un subgrupo concreto de países europeos, tales como los países no incluidos en la zona euro (Reino Unido, Suiza, Suecia, Dinamarca y Noruega) por medio de un ETF que replique el índice MSCI Europe ex-EMU, donde la ponderación de Suiza se incrementa del 14% al 25% en comparación con el índice global. También es posible una exposición al MSCI Nordic countries (países nórdicos) que representa solamente el 9% del MSCI EUROPE, pero que ofrece unas características económicas bastante distintas, tales como unas finanzas públicas saneadas, dando lugar a una diversificación útil dentro del universo de inversión europeo.
2) Desglosar un índice existente en sub-segmentos por ratings y vencimientos
Se han creado nuevas exposiciones de ETF desglosando un índice existente en sub-segmentos complementarios. Este ha sido especialmente el caso de los ETFs de renta fija, donde se han producido importantes innovaciones en los últimos años.
Un ejemplo de ello puede apreciarse con respecto al índice líder de bonos del Estado de la zona euro: el EuroMTS Investment Grade Broad All Maturities. El uso de ETFs para proporcionar un desglose de esta exposición por vencimientos, subdividiendo el índice en cinco segmentos de vencimiento desde 1-3 años hasta los 10-15 años, ha permitido a los inversores implementar distintas estrategias sobre la curva de tipos de interés.
Estos ETFs innovadores han brindado a los gestores la oportunidad de aplicar visiones complejas de inversión a través de una simple transacción y lograr una diversificación mucho mayor que utilizando futuros. En efecto, los futuros no están disponibles en todos los mercados y no proporcionan el mismo nivel de detalle. Yendo aún más lejos ofreciendo una alternativa a los futuros de renta fija, algunos proveedores han lanzado ETFs de renta fija a corto por vencimientos. De esta forma los inversores pueden beneficiarse de una exposición inversa a la del índice subyacente, con una duración modificada negativa.
También dentro del universo de deuda pública de la zona euro, los proveedores de ETFs han dado respuesta a las demandas de los clientes y han trabajado con los proveedores de índices para crear nuevos índices de títulos de deuda pública por ratings. En plena crisis de la zona euro, los inversores querían diferenciar entre los países con mejores ratings (AAA) de los países periféricos. El índice se dividió en dos índices complementarios, permitiendo a los inversores elegir uno u otro en función de sus expectativas. Estos ETFs innovadores han tenido mucho éxito, especialmente los den peores ratings, durante los 12 últimos meses, y han contribuido a impulsar el rápido crecimiento experimentado por los ETFs de renta fija.
3) Innovar aportando un valor añadido a la exposición existente
Los proveedores de ETFs trabajan con los proveedores de índices para desarrollar nuevos índices de estrategia para satisfacer las necesidades y considerar las restricciones de los inversores. Tales innovaciones responden habitualmente a consideraciones y oportunidades de mercado.
- Exposición a la renta variable internacional integrando la cobertura de divisas
Los ETFs con cobertura de divisas pueden ofrecer una solución alternativa integrada para reducir el riesgo de tipos de cambio mediante una simple transacción y son adecuados a períodos de alta volatilidad de las divisas. En efecto, construidos usando índices de estrategia que combinan exposición a un mercado bursátil (Estados Unidos, Japón, Europa) con la cobertura de divisas integrada, pueden ofrecer una solución simple y competitiva minimizando la gestión operativa del riesgo de tipo de cambio.
Representan un mercado de ETFs europeo en expansión con la creación de nuevos productos que abarcan distintas clases de activos subyacentes: renta variable de países en desarrollo y emergentes, etc...
El primer ETF con cobertura del riesgo de divisas apareció a principios de 2011 en Europa, ofreciendo una cobertura mensual. Más recientemente, Amundi ETF ha innovado en Europa ofreciendo una cobertura diaria4, reduciendo en consecuencia el riesgo de divisas prácticamente a cero. Con este método, la cobertura se ajusta cada día para reflejar los movimientos del índice denominado en divisa local mediante el uso de contratos a plazo con vencimiento a final de cada mes. Este reajuste diario reduce la influencia de la volatilidad de los tipos de cambio mediante la optimización de la cobertura de divisas.
- Optimizando la liquidez
Una de las ventajas de un ETF consiste en facilitar el acceso a nichos de inversión, siendo por tanto importante centrarse en la liquidez. Y como la liquidez de un ETF es proporcional a la de su índice subyacente, los proveedores han desarrollado estrategias para tenerlo en cuenta. La clase de activos “high yield” europeos son una buena ilustración de este requisito; pues el mercado europeo de bonos “high yield” no tiene mucha liquidez y para poder lanzar con éxito un ETF es esencial ser capaces de replicar un índice líquido. Para abordar este problema, Amundi ETF y Markit Iboxx han desarrollado un índice idóneo que incluye a los 30 bonos “high yield” denominados en euros más líquidos para reducir los riesgos de liquidez.
- Adoptando un enfoque temático
Las temáticas de inversión también son una fuente de innovación. La temática de bienes de lujo, muy expandido en muchas economías, es un buen ejemplo de cómo un ETF puede aportar algo nuevo al universo de inversión. Trabajando con el proveedor de índices S&P, Amundi ETF ha lanzado el primer ETF centrado en el sector global de bienes y servicios de lujo, permitiendo a los inversores diversificar y tener una exposición no diluida a 80 valores globales relacionados con el lujo de 12 países y sectores diferentes (tal y como puede apreciarse a continuación).
4) Ofrecer exposición a índices creados usando nuevas metodologías
La última tendencia en Europa ha sido la creación de ETFs que ofrecen exposición a índices no ponderados por capitalización de mercado, a menudo llamados ETF “smart beta” o “beta inteligente”. Los más habituales aplican un enfoque de factor único, como el tamaño, estilo, volatilidad, riesgo, e incluso de capitalización equiponderada.
Recientemente, el mercado ha asistido a la irrupción de ETFs que replican índices multi-factoriales, que combinan varios enfoques en un solo índice para ofrecer el máximo efecto de diversificación con el mejor equilibrio rentabilidad/riesgo.