Salud corporativa, ¿una fachada?

Bernard Laliere_noticia
Firma: cedida (DPAM).

TRIBUNA de Bernard Lalière, responsable de crédito en DPAM. Comentario patrocinado por DPAM.

La inflación mantuvo los mercados bajo un férreo control en 2023, pero ha empezado a retroceder lentamente, con los bancos centrales de todo el mundo señalando el fin de las subidas agresivas de tipos de interés. Este giro en la política monetaria, que busca un equilibrio entre la lucha contra la inflación y la garantía de la estabilidad financiera, se refleja en las expectativas de los mercados, que prevén tres recortes de tipos de interés de aquí a julio de 2024, tanto en Europa como en Estados Unidos.

La Fed ha indicado claramente el fin de su campaña de subidas de tipos de interés, y los informes sobre la ralentización de la inflación y el enfriamiento del mercado laboral en EE.UU. dibujan un panorama aparentemente positivo. Pero aunque estas noticias han animado a los mercados de renta fija en los últimos meses, un nuevo temor se cierne sobre el horizonte. Bajo la fachada de una reactivación económica, hay signos preocupantes de estancamiento en el crecimiento.

Los principales índices mundiales, tanto del sector manufacturero como del de servicios, pivotan hacia valores negativos. Del mismo modo, las encuestas de los líderes económicos son cada vez menos positivas. Actualmente, las economías se apoyan en la dinámica positiva de los últimos años, pero ¿por cuánto tiempo? El impacto previsto de una ralentización de la demanda y el endurecimiento de las condiciones financieras podría alterar rápidamente la narrativa del mercado.

Mientras tanto, en Europa, observamos que las cifras de inflación de la zona euro están mejorando. Aun así, el debilitamiento de los datos económicos alemanes podría sugerir problemas estructurales subyacentes en una de las economías más grandes de Europa. A pesar del optimismo que suscitan los recortes de tipos de interés como señal de una estabilización del endurecimiento financiero, hay que plantearse si los inversores están suficientemente preparados para una posible desaceleración económica.

No obstante, a pesar de estas complejidades, hay aspectos positivos a tener en cuenta: el historial de la renta fija en los últimos meses, combinado con los atractivos rendimientos generales de los bonos corporativos, sugiere una valiosa oportunidad para aprovechar buenas rentabilidades y capitalizar las posibles plusvalías.

La capacidad de recuperación de las empresas también es notable. Los márgenes empresariales, las reservas de efectivo y el hecho de que en general se haya evitado el reapalancamiento durante el reciente ciclo dibujan un panorama de solidez. Sin embargo, existen algunas diferencias notables entre las empresas, especialmente en sectores como el de gran consumo (supermercados), que están sujetos a una competencia intensa y tienen un poder de fijación de precios limitado, lo que ilustra las disparidades de resistencia y salud financiera entre los distintos sectores empresariales.

Aunque esta dinámica podría tener implicaciones para los distintos tipos de empresas, en general, las compañías parecen estar mucho mejor preparadas que en desaceleraciones anteriores, gracias a estrategias financieras prudentes en respuesta a retos globales como el COVID-19 y la guerra en Ucrania.

Cómo se traduce esta resistencia en oportunidades de inversión

Está claro que la selección del crédito será uno de los factores clave de la inversión que impulsará la rentabilidad este año. La disparidad en la resistencia de las empresas pone de manifiesto que no todas las oportunidades de inversión son iguales, y subraya que los motores de la rentabilidad en 2024 dependerán de una selección de créditos con criterio. Dentro del mercado crediticio, los bonos con grado de inversión son especialmente atractivos ya que la solvencia general de los emisores sigue una trayectoria ascendente, evidenciada por un mayor número de mejoras de calificación que de rebajas. Con un buen diferencial sobre el tipo sin riesgo, combinan balances saneados y perfiles de vencimiento equilibrados.

El segmento high-yield, aunque más volátil, ofrece una prima crediticia adecuada para emisores seleccionados que han mantenido o mejorado sus perfiles de crédito. Con una selección cuidadosa, las inversiones de alto rendimiento pueden mitigar significativamente los riesgos de crédito. Suponiendo impagos moderados, la capacidad de las empresas para hacer frente a los cupones no debería hacer descarrilar los beneficios del mercado de crédito en 2024.

En ausencia de grandes fusiones y adquisiciones o compras apalancadas, la necesidad de nuevas emisiones podría reducirse en comparación con años anteriores. Las empresas refinanciarán primero su deuda para beneficiarse de un entorno de tipos mejor que el del año pasado, pero no empezarán a aumentar el apalancamiento debido a las incertidumbres económicas actuales.

El contexto técnico sigue siendo favorable. Los beneficios atractivos, junto con los fuertes flujos de inversión hacia activos investment-grade y high-yield, ponen de relieve un atractivo duradero del crédito. Dado que es probable que las empresas renueven su deuda a mejores tipos y eviten aumentar su apalancamiento, las perspectivas de los mercados de crédito parecen prometedoras, incluso ante las incertidumbres económicas. Pero, como siempre, la clave reside en la selección estratégica y en una gran conciencia de la evolución del panorama económico.

Aviso legal

Degroof Petercam Asset Management SA/NV (DPAM) l rue Guimard 18, 1040 Bruselas, Bélgica l RPM/RPR Bruselas l TVA BE 0886 223 276 l

Solo para inversores profesionales.

Todos los derechos permanecen con DPAM, quien es el autor del presente documento. Queda prohibido el almacenamiento, uso o distribución no autorizados. Aunque este documento y su contenido se prepararon con el debido cuidado y se basan en fuentes y/o proveedores de datos de terceros que DPAM considera confiables, se proporcionan sin ninguna garantía de ningún tipo y sin garantía de corrección, integridad, confiabilidad, actualidad, disponibilidad, comerciabilidad o idoneidad para un propósito particular. Todas las opiniones y estimaciones reflejan la situación al momento de emisión y pueden cambiar sin previo aviso. Las circunstancias cambiantes del mercado pueden invalidar las afirmaciones de este documento.

La información proporcionada aquí debe considerarse de naturaleza general y no tiene la intención, bajo ninguna circunstancia, de ser adaptada a su situación personal. Su contenido no representa un consejo de inversión, ni constituye una oferta, solicitud, recomendación o invitación para comprar, vender, suscribir o ejecutar cualquier otra transacción con instrumentos financieros. Este documento no está dirigido a inversores de una jurisdicción donde tal oferta, solicitud, recomendación o invitación sería ilegal. Tampoco este documento constituye una investigación de inversión independiente u objetiva o un análisis financiero u otra forma de recomendación general sobre transacciones en instrumentos financieros según lo referido en el Artículo 2, 2°, 5 de la ley del 25 de octubre de 2016 relacionada con el acceso a la provisión de servicios de inversión y el estado y supervisión de las empresas de gestión de cartera y asesores de inversión.