Tenemos que hablar sobre el sector energético

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geoftheref, Flickr, Creative Commons

La inversión sostenible iba a ser la sentencia de muerte del sector energético tradicional. La transición a una economía verde condenaría a la obsolescencia a los históricos gigantes del petróleo tradicional. Y justo cuando el mercado se mostraba más convencido de esa narrativa, cuando los flujos apostaban por la temática de energía limpia, los vientos cambiaron. 2021 fue un ejercicio estelar para la energía.

El sector energético generó el mejor retorno por acción en EE.UU., Europa y a nivel global, según los cálculos de SPDR ETF (parte de State Street Global Advisors). Los resultados empresariales y el flujo de caja respondieron con fuerza al rebote de los precios del crudo. Una recuperación del petróleo que las compañías de crudo y gas acompañaron disciplina empresarial.

Los inversores han empezado a responder, también como parte de un mayor posicionamiento value y como cobertura frente a la inflación. Así, ya se detecta un pequeño rebote en los flujos, pero esas compras llegan desde niveles de infraponderación muy altos. Por eso, desde SPDR, defienden que aún queda recorrido. De hecho, sigue siendo una de las apuestas destacadas en el SPDR Sector Pick que elabora el equipo de Rebecca Chesworth, estratega sénior de ETF de Renta Variable.

La ASG necesita al sector energético

Chesworth entiende perfectamente el movimiento que hemos visto en las últimas semanas. Ese cambio en el sentimiento. “El sector energético fue descartado por el auge de la ASG, pero algunos inversores se han dado cuenta de que en realidad los grandes jugadores de crudo y gas pueden ser un aliado en esta transición”, explica. Además, estas empresas históricas ahora cuentan con un importante flujo de caja gracias a las subidas de los precios que se puede poner a trabajar en energías más limpias. “Si bien es comprensible que la consideración de las emisiones de carbono de los combustibles fósiles continúe excluyendo a algunos inversores, la comprensión de que estas empresas tienen las habilidades y el flujo de efectivo necesarios para ayudar a promulgar planes de transición climática es transformadora”, argumentan desde SPDR.

Y es que el momentum positivo no da señales de frenarse. En opinión de Elliot Hentov, responsable de Análisis de Políticas de State Street Global Advisors, los precios del crudo se mantendrán elevados. Ven que los precios del crudo se mantendrán fuertes durante los próximos meses en respuesta a la oferta aún restringida, las reservas bajas y la creciente demanda mundial. “Quizás toquen su pico en este primer trimestre y se alivien ligeramente, pero veo poco probable que vuelvan a bajar de los 50 dólares en barril nunca más”, vaticina.

Además los beneficios más altos se están reflejando en grandes aumentos en los dividendos (en algunos casos, de vuelta a niveles anteriores a la pandemia) y recompra de acciones. A esto se suma que el sector energético es una propuesta convincente desde la perspectiva de una apuesta por los cíclicos y cobertura contra la inflación. Por ello, el sector energético es una de las apuestas destacadas de SPDR.