Según afirman desde la entidad, el regreso de Trump a la presidencia de EE.UU. marca un 2025 lleno de retos y oportunidades para los mercados globales.
El regreso de Trump a la presidencia de EE.UU. ha generado un amplio debate sobre el futuro de los mercados y las implicaciones de sus políticas en la economía global. Si bien su enfoque de desregulación y estímulos económicos promete impulsar el crecimiento en sectores clave, la persistencia de la inflación y las tensiones geopolíticas sugieren un entorno complejo para los inversores. José Miguel Maté, consejero delegado de Tressis, comenzó el encuentro con los medios que tuvo lugar este jueves afirmando que con la llegada de Trump, "habrá más oportunidades que amenazas", pero que por el momento se mantendrán cautos, hasta ver como se aplican sus principales políticas.
Tras un 2024 marcado por conflictos geopolíticos, elecciones clave en varios países y bajadas de tipos de interés, el 2025 arranca incógnitas sobre si las políticas de Trump serán inflacionistas y cómo afectarán a la volatilidad de los mercados. Sin embargo, la entidad mantiene la confianza la economía estadounidense, a pesar de las valoraciones elevadas. "La victoria de Trump no es un factor de incertidumbre, es una buena noticia para el mercado, la economía y las relaciones internacionales", afirmó Daniel Lacalle, economista jefe de la entidad. Según la firma, la flexibilidad en las carteras y la diversificación geográfica y sectorial permitirán sortear los vaivenes que pueda tener el mercado este 2025.
Apuesta por la renta variable estadounidense
Las estrategias de Tressis para este nuevo año giran en torno a un optimismo moderado y selectivo ante el crecimiento dispar entre regiones. Según Maté, "el entorno estará marcado por una moderación de los tipos de interés y oportunidades clave en sectores específicos".
La entidad mantiene una visión positiva sobre los activos de riesgo, con un enfoque particular en la renta variable estadounidense, destacando sectores como tecnología, salud, aeroespacial y ocio, beneficiados por políticas de desregulación e incentivos del gobierno de Donald Trump. "EE.UU. sigue siendo un mercado atractivo, respaldado por la liquidez institucional, la recompra de acciones y sólidos resultados empresariales", destacó Lacalle.
En contraste, la entidad muestra un enfoque cauteloso hacia los mercados emergentes, afectados por la fortaleza del dólar y los desafíos estructurales de regiones como China, y con ciertos sectores europeos como el consumo y la energía. En este contexto, la firma destaca que la diversificación y flexibilidad estratégica serán esenciales.
Gestión activa en renta fija y un entorno mixto en materias primas
En el ámbito de la renta fija, Tressis subraya la importancia de una gestión activa. Recomienda deuda de alta calidad con duraciones cortas, dadas las presiones inflacionarias y un ciclo de tipos menos agresivo de lo esperado. En palabras de Lacalle, "la reducción del gasto y una prudente política monetaria son claves para estabilizar el mercado".
En cuanto a materias primas, Tressis dibuja un entorno mixto: metales como el cobre y el aluminio seguirán siendo fundamentales en la transición hacia energías renovables, mientras que el oro conserva su atractivo como activo refugio ante la volatilidad. En el sector energético, las políticas de desregulación de Trump, según Lacalle, podrían dar un impulso a la producción en EE.UU., incluyendo la energía nuclear, que podría consolidarse como una opción clave en la transición hacia una matriz energética más sostenible.