Acatis Gané Value Event Fonds: Batir al mercado sin perder sueño

J. Henrik Muhle Uwe Rathausky Acatis Value Gane
(Izq. a drch.) Dr. Uwe Rathausky y J. Henrik Muhle

Batir al mercado global, pero con una continuidad que permita a los inversores dormir bien en todas las fases del mercado. Así definen J. Henrik Muhle y Dr. Uwe Rathausky, co gestores del Acatis Gané Value Event Fonds, la filosofía de este mixto moderado. Y su política de inversión también se resume en cuatro palabras: invertir en los ganadores. Esta estrategia de la boutique alemana Acatis también bebe de la apuesta por el value que caracteriza a su casa.

“Significa que apostamos por empresas fuertes con modelos de negocio sostenibles, balances sólidos y altos márgenes, lo que les permite crear valor añadido para sus accionistas”, explican. Además de la creación de valor, tienen un segundo requisito. “Mantenemos los riesgos bajos e invertimos sólo cuando nuestro compromiso se apoya en un evento positivo”. De ahí el nombre del fondo: la combinación de Valor y Evento.

Para los gestores, esta es la clave del éxito de su proceso de inversión valor-evento este año; una asignación anticíclica de activos han permitido, en su opinión, evitar un año de pérdidas desde el inicio.

Proceso de inversión

Este mixto moderado global de la gestora Acatis es de los pocos fondos en España que puede presumir de tener el Sello FundsPeople 2020 por una triple calificación ABC. Es decir, que está en el punto de mira de Analistas, es Blockbuster, y además su gestión le avala como Consistente. Detrás de ese hito puede estar su sistema propietario, el Modelo de Scoring de GANÉ. El sistema da lugar a una lista de unas 100 acciones que supervisan continuamente. “Siempre preparados para aprovechar una oportunidad excepcional”, afirman.

Definen su proceso de análisis como bottom-up en combinación con una disciplinada asignación de activos anticíclica. “Queremos entender cada modelo de negocio en detalle antes de convertirnos en inversores a largo plazo, preferiblemente con un diálogo muy reforzado con los equipos de gestión. Las opiniones macro y el ruido de mercado son secundarios ya que nuestro foco está totalmente centrado en los rendimientos de la compañía en los próximos 3, 5 y 7 años”, explican.

Para ellos, menos es más. El resultado es una cartera muy enfocada y concentrada porque prefieren entender al máximo las compañías en las que invierten. La cartera es global, por lo que tiene una mirada internacional hacia bonos, acciones y efectivo. Dicho lo cual, reconocen un enfoque en Europa, especialmente en los países de habla alemana, y en los Estados Unidos, con independencia de la industria de la compañía, tamaño o la pertenencia a un índice.

Actualización de la cartera

Los gestores ven poco probable que los tipos suban a medio plazo. “El mercado alcista de bonos de los últimos 35 años ha terminado”, defienden. Y eso les lleva a determinar que los mercados de renta variable ofrecen rendimientos más atractivos en un entorno de bajos tipos de interés. Y eso se refleja en la cartera actual. “Estamos claramente centrados en los mejores modelos de negocio en los mercados de renta variable, dado que el riesgo que se asumen en renta fija los inversores no está suficientemente compensado”, afirman. Esta visión se implementará en base a dos pilares principales: los aristócratas del dividendos y los ganadores de la digitalización.

En marzo hicieron buen uso de su liquidez: aumentaron la posición en renta variable de aproximadamente el 67% a aproximadamente el 85%. Después, la recuperación sin precedentes fue utilizada para tomar beneficios y reducir ese nivel al entorno del 71%. Concretamente, vendieron valores con modelos de negocio con alto impacto por la crisis del COVID-19 y redujeron las ponderaciones en el espacio de la tecnología. A pesar de que el perfil de riesgo-recompensa del mercado de renta variable es menos atractivo que en marzo, siguen creyendo en las plataformas tecnológicas como Amazon, Microsoft, Wix.com. Por eso decidieron aumentar sus posiciones marginalmente con la reciente debilidad del Nasdaq, lo que llevó la exposición a renta variable al 74% aproximadamente.