Tanguy Le Saout, responsable de renta fija europea de Pioneer Investments, pronostica que los pronósticos de inflación del BCE para 2016 y 2017 no se cumplirán, lo que obligará a Mario Draghi a anunciar nuevas medidas.
Hace aproximadamente un año por estas fechas Tanguy Le Saout, responsable de renta fija europea de Pioneer Investments, vaticinaba la puesta en marcha del programa de adquisición de activos del BCE apoyándose en tres indicadores: decepcionantes datos económicos, capacidad para la expansión del balance de la autoridad monetaria y las expectativas de inflación. El experto vuelve a recurrir a este último elemento para predecir, un año después, que Draghi anunciará más estímulos en 2016.
El argumento de Le Saout parte de la evolución del precio del petróleo, que recientemente se ha desplomado hasta tocar mínimos de más de una década, a pesar de que los factores fundamentales (exceso de demanda, mantenimiento del ritmo de producción de la OPEP, preocupación por el crecimiento global). “En teoría debería ser bueno para la economía global; después de todo, hay muchos más consumidores de petróleo a nivel global que productores, y los precios más bajos actúan como un impulso a las rentas del consumidore. Pero intente decirle eso al presidente del BCE Mario Draghi, que ahora afronta la incómoda posición de tener probablemente que revisar a la baja las previsiones de inflación para 2016 y 2017 en la reunión del BCE de marzo”, explica el gestor.
Le Saout recuerda que, en la reunión de la entidad celebrada en diciembre, se pronosticó que la inflación en Europa sería de media un 1% en 2016 y un 1,6% en 2017… pero la cifra oficial del mes de diciembre publicada posteriormente reveló que el coste de la vida se situó en tan sólo el 0,2% el año pasado. “Por tanto, parece improbable que se cumplan las previsiones del BCE para 2016 y 2017”, concluye el experto.
Éste se atreve a hurgar más en la llaga, fijándose en la medida favorita del banco central para medir las expectativas de inflación, la tasa a cinco años: ésta ha retrocedido hasta el 1,6% recientemente. “Eso deja potencialmente abierta la puerta para más medidas QE en la próxima reunión”, sentencia Le Saout. El punto de vista de Pioneer, explica el experto, es que “habrá una considerable oposición en el seno del BCE al anuncio de más medidas acomodaticias en la reunión de marzo, por lo que quizá lo mejor que podamos esperar de Draghi serán más promesas de actuación si la situación de la inflación continúa deteriorándose”.