La directora de Estrategia de J.P. Morgan AM aboga por la templanza y diversificación en las carteras, aunque ve un escenario favorable para los activos de riesgo.
Tras un primer trimestre positivo en rentabilidades para la renta variable, aunque algo más difícil para la parte conservadora de la renta fija, como es la deuda soberana, que estaba muy apoyada en las agresivas expectativas de recortes de tipos en 2024, es momento de conocer las preguntas más frecuentes que hacen los clientes a sus asesores y banqueros privados.
Con los últimos datos de inflación y crecimiento, y en medio de los resultados empresariales, Lucía Gutiérrez-Mellado, directora de Estrategia para España y Portugal de J.P. Morgan AM, desgranó las respuestas a dichas preguntas, dando una visión optimista para los activos de riesgo.
Pregunta 1: Crecimiento en 2024
A nivel global, la economía continúa desacelerándose respecto a 2023, pero seguirá en terreno positivo, con una convergencia en el crecimiento entre EE.UU. y Europa, apunta la directora.
Los motores que ayudan son la reactivación de la actividad manufacturera, con un índice a nivel agregado en territorio de expansión, que son niveles no vistos desde octubre de 2022; y el consumo, que sirve de apoyo al crecimiento. Gracias a la caída de la inflación, el poder adquisitivo de las familias se ha recuperado.
Si el crecimiento en EE.UU. estuvo apoyado por el consumo en 2023, también lo hará en 2024, aunque con un cambio de patrón, ya que en lugar de tirar de ahorro tirarán de los salarios. Ahora las ayudas fiscales están mucho más relacionadas con la actividad manufacturera, como muestra la pequeña reactivación del PMI. No obstante, el crecimiento se desacelerará a lo largo del año, a un entorno del 2%, tras el fuerte crecimiento del 2023.
En Europa la historia es diferente, con el crecimiento dando señales de estabilización para una pequeña recuperación a lo largo del año. Apoyado en la actividad manufacturera y en una recuperación de la confianza del consumidor tras la caída de los precios en la energía y en los alimentos. Además, los beneficios de los Planes de Recuperación (apoyos fiscales) aprobados durante la pandemia comenzarán a notarse este y los dos siguientes años.
En China la situación sigue siendo complicada, con un mercado inmobiliario que sigue mostrando dificultades que inciden en la confianza consumidora, haciendo necesario el anuncio de nuevas medidas.
Pregunta 2: ¿Qué va a pasar con la Inflación?
En cuanto a EE.UU., por tercer mes consecutivo los datos han decepcionado, aunque lo importante es analizar como están contribuyendo cada uno de los componentes, y claramente “los niveles en los que estamos no tienen nada que ver con los que se alcanzaron en 2022, donde se tocaron los máximos”, apunta la directora. La buena noticia es que parece que los alquileres, uno de los componentes más pegajosos, apunta a haber tocado máximos. En cuanto a servicios, en el último mes la parte de viajes ha mejorado. Y en cuanto al mercado laboral, la fuerte inmigración a servido para ajustar la oferta y demanda laboral y por tanto las presiones salariales.
Las dudas están en el precio del petróleo y la energía, “pero con la información a día de hoy, creemos que la inflación va a continuar cayendo, no en línea recta sino con baches en el camino, como este primer trimestre”, aclara.
En Europa los datos siguen mejorando, tanto la inflación general como la subyacente. Como indica Gutiérrez-Mellado, Lagarde comentó que hay que seguir la evolución del sector servicios y la presión salarial, para ver la evolución, pero aún así, parece que está más cerca del objetivo del BCE.
Pregunta 3: ¿Qué va a pasar con los tipos de interés?
“Pensamos que va a haber bajada de tipos de interés, pero más tarde de lo que se esperaba”, apunta la directora. Comenta que ahora la pregunta es cuándo van a empezar las bajadas y cuántas vamos a ver. J.P. Morgan AM espera que sean dos, y que probablemente sean más hacia la última parte del año en el caso de la Fed.
En cuanto al BCE, si los datos siguen siendo favorables, se podría ver la primera bajada en junio. Y en Japón, señala que todo apunta que ponen fin a la política de tipos de interés negativo, dejarán de controlar la curva de tipos y las compras de deuda.
Pregunta 4: ¿Posicionamiento en carteras?
Con este escenario, J.P. Morgan AM sigue sobreponderando los activos de riesgo, con mayor foco en EE.UU. que en Europa, por el crecimiento de beneficios, mismo que será muchos más generalizado a nivel sectorial y no solo el sector tecnológico, y también porque las valoraciones están en torno a la media (si se elimina el efecto de los 7 Magníficos).
En cuanto a la renta fija, comenta que están más neutrales en duración debido a que esperan que las tir se moverán en un rango debido a los datos de crecimiento e inflación, aunque las expectativas de bajadas de tipos harán que esos repuntes sean menos agresivos y estén más acotados.
Y dentro de renta fija, la directora de Estrategia comenta que encuentran mayor valor en el crédito de baja calidad crediticia por los cupones que pagan más que por estrechamiento de diferenciales.
Gutiérrez-Mellado comentó que, tras el bombardeo de Irán, es pronto para saber las consecuencias, pero hizo hincapié en tener carteras bien diversificadas y tener templanza ante un posible incremento en los conflictos.
Entre los riesgos que están analizando destacan:
- La escalada en el precio del petróleo, especialmente si las tensiones se trasladan a otras regiones de la zona. Aunque reconoce que “en estos días el precio del crudo ha estado bastante contenido, lo que demuestra que hay que ser cautos a la hora de tomar decisiones”.
- Si se genera un conflicto en el Estrecho de Ormuz, importante para el transporte de bienes, además del petróleo.