¿Qué ventajas ofrece la inversión en tramos cortos? Daniel Lázaro (BBVA AM), Raquel Blázquez (Ibercaja), Ignacio Ballesteros (Inversis) y Rocío Poquet (Aego AM) analizan los factores a tener en cuenta al seleccionar instrumentos de renta fija de corto plazo.
Descubre las bondades de invertir en renta fija a corto plazo
A nivel general, a la hora de seleccionar un fondo de renta fija, desde Inversis se fijan en la flexibilidad del fondo y en su gestión de la liquidez, de forma que eventos extremos no afecten de forma desproporcionada al inversor, como puede ocurrir, por ejemplo, en el caso de ventas forzosas por downgrades en el rating de un emisor o momentos en los que se reduce drásticamente la liquidez en el mercado. También ven importante que en el análisis se combine la visión top down con botton up, “donde las condiciones macro impactan mucho en las valoraciones”, aclara su selector de fondos, Ignacio Ballesteros.
También observan si hay alineación entre gestores y analistas de compañías y los comités de inversiones de las gestoras con relación a la visión macro. Asimismo, son más positivos con gestoras especialistas en un tipo de activo determinado y buscan, en momentos de incertidumbre, como el actual, “gestores que puedan aportar más alfa, que tengan la flexibilidad suficiente y la capacidad de conocer en qué tipo de activo tienen que estar en cada momento del mercado”.
Más centrado en la renta fija a corto plazo, hay que tener en cuenta la abundante letra pequeña de los folletos, pues suele tener muchos condicionantes. Tamaño mínimo de las emisiones en las que se puede entrar, porcentaje máximo en high yield o limitaciones en los pesos por tipo de emisión o emisor. “Es un tipo de activo en el que el análisis del instrumento es clave, es más difícil de conocer y tienen más limitaciones internas que otros tipos de activo”, reconoce.
1/4Además de los condicionantes mencionados, en Ibercaja detallan otros factores a tener en cuenta a la hora de seleccionar instrumentos a corto plazo como son aquellos referidos a lo que su jefa de Inversiones de Banca Privada, Raquel Bláquez, llama la carcasa de un fondo de inversión. “Miramos lo que tiene debajo en el fondo, pues muchas veces los instrumentos a corto plazo son emisiones que no tienen calificación crediticia, por lo que hay que monitorizar muy bien el riesgo de crédito de ese emisor”. Asimismo, analiza el tamaño de las emisiones a incorporar, “pues es importante que las emisiones a invertir tengan tamaño suficiente, ya que, en general, los fondos monetarios tienen mucho volumen de activos bajo gestión”, advierte.
En cuanto a ventajas, Blázquez señala tres: menor volatilidad, posibilidad de reinvertir y rentabilizar la liquidez. Menor volatilidad “al ser menos sensible a las decisiones de subida de tipos, lo que para el inversor se traduce en más estabilidad”, afirma.
Como es obvio, al invertir a corto plazo, vence antes la inversión, lo que abre la posibilidad de reinvertir, de cambiar de estrategia, de “resetear la inversión” a tramos más largos o invertir incluso en otro tipo de activos, como podría ser la renta variable.
Por último, la renta fija a corto plazo aporta “cuasi liquidez” o, dicho de otro modo, “es una forma de rentabilizar la liquidez”, aclara Blázquez.
2/4El gestor de fondos del equipo de Multi-asset de BBVA Asset Management, Daniel Lázaro Sánchez, coincide en destacar las ventajas señaladas anteriormente, añadiendo que la volatilidad puede ser un tercio o la mitad, dependiendo de los tramos, y que la posibilidad de reinversión puede ser muy positiva cuando se hace una gestión dinámica de las carteras, como es el caso de su entidad.
En cuanto a la selección de instrumentos, desde BBVA AM se valora la consistencia de los resultados y la capacidad de los gestores para batir al benchmark, tanto en escenarios alcistas como en bajistas.
En este punto, Lázaro explica que determinados vehículos “son más capaces de batir al índice en un escenario determinado, por ejemplo, un escenario alcista porque tiene más beta o tiene sesgos estructurales, pero quizás no tanto en los bajistas”.
Llama también la atención en la importancia de los sesgos, “porque puede haber productos que sistemáticamente tienen más high yield y baten a su índice a 3 años o incluso a 5 años, pero hay que indagar el motivo y ver si se debe a un sesgo estructural o si realmente es por la capacidad del gestor”.
3/4Partiendo de que “el análisis de los riesgos y su monitorización son la base de cualquier inversión”, recalca Rocío Poquet Nieto, sales Manager Wholesale de Aegon Asset Management, ya sean los balances o el apalancamiento, en el caso, por ejemplo, del high yield o de la renta variable; o el originador y la sensibilidad de los prestamos subyacentes a las subidas en los tipos, en el de los ABS (siglas en inglés de Asset Backed Securities).
En este tipo de producto, Poquet reconoce la complejidad del análisis por la estructura del instrumento y por todos los factores a tener en cuenta a la hora de monitorizar el riesgo. Explica que, como característica principal, es un sector/país, por lo tanto, no están diversificados lo que hace que sea “más fácil analizarlo”, pero no por ello menos minucioso, pues cada Estado tiene sus propias normas y el mercado tiene unos hábitos distintos.
Otro aspecto es el “apetito por el tipo de activo”. Aegon AM se centra en el tramo de investment grade europeo, especialmente porque en el Viejo Continente no hay dación en pago lo que da mayor protección. Ese apetito pasa por “cuál es el diferencial y la prima de riesgo, porque en función de dónde se origine y de las condiciones del mercado, van a emitirse a una prima u otra” y es el que determina aumentar o reducir la exposición a un país, aclara resaltando que la aseguradora no ha tenido ningún impago desde que en 2001 entró en este activo de renta fija.
“Es un activo bastante resistente, que tiene una base de inversores muy estable y descorrelaciona las carteras”, concluye.
4/4