En un sector cada vez más competitivo y regularizado, las gestoras están tirando de chequera para crecer vía adquisiciones. Las entidades ofrecen un pequeño aperitivo del M&A que está por venir en Europa.
Dos de los grandes movimientos corporativos del año pasado, la adquisición de Cazenove por parte de Schroders y la de Scottish Widows (SWIP) por Aberdeen han vuelto a ser noticia. Si Schroders anunciaba los cambios realizados para integrar la gama de Cazenove a su oferta el pasado 19 de marzo, ahora le ha llegado el turno a Aberdeen. La gestora británica ha indicado que el 1 de abril ha finalizado oficialmente el proceso de adquisición de Scottish Widows Investment Partnership (SWIP), con lo que Aberdeen se convierte oficialmente en la mayor entidad de gestión de activos independiente que cotiza en Europa, con 393.000 millones de euros bajo gestión (de los cuales 167.000 millones son fruto de la adquisición con SWIP).
Desde la gestora han indicado que el valor de la compra a Lloyds, anterior dueño de SWIP – que incluye una participación del 9,9% en Aberdeen y un potencial pago complementario de unos 119 millones de euros según el rendimiento de la relación estratégica – ronda los 666 millones de euros, “y proporciona una valiosa plataforma para la relación estratégica a largo plazo con Lloyds”. Una relación que abarca los negocios de gestión de patrimonios, seguros, banca comercial y minorista.
Aunque hayan sido los acuerdos de mayor calado, los casos de Aberdeen y Schroders no son aislados: en 2014 sigue habiendo más gestoras dispuestas a seguir creciendo dentro de un sector cada vez más competitivo y regularizado a través de la adquisición de otras firmas. En la última semana y media se han visto de hecho varios ejemplos. Es el caso del acuerdo entre Standard Life y Phoenix Group para que la primera adquiera la gestora Ignis AM por 468 millones de euros.
Otra entidad que ha movido ficha ha sido Amundi, que se ha ido de compras hasta en dos ocasiones en las últimas dos semanas. La semana pasada anunciaba la compra de una participación del 12,8% en la gestora Tikehau IM (especializada en deuda de compañías privadas) y esta semana trascendía que también ha comprado la firma malasia con sede en Kuala Lumpur KAF Fund Management, subsidiaria a su vez de KAF Group, un inversor institucional especialista en renta fija con más de 1.200 millones de dólares en activos bajo gestión. Esta operación se realiza en el marco de su plan de expansión en el Sudeste asiático y con la intención de ampliar su gama de renta fija asiática, incluyendo oferta en el mercado local.
El último ejemplo de M&A viene de la mano de Julius Baer, que ha incrementado su participación en la firma brasileña GPS, del 30% que había comprado en 2011 al 80% actual.
Sin embargo, las grandes gestoras de fondos no son las únicas que ha tirado de chequera recientemente. Una de las que lo ha hecho, y también por partida doble, ha sido La Française AM: en febrero adquirió un 40% de Tages Capital (firma especializada en soluciones alternativas multi manager) y compró junto con su socio Forum Partners la firma Cushman & Wakefield Investors, con la que refuerza su oferta en real estate.
De esta manera, se puede afirmar que las gestoras de fondos europeas están siendo una de las primeras puntas de lanza del M&A en el continente. Un aperitivo de lo que pueda llegar dado que la expectativa generalizada es que este año aumenten los movimientos corporativos en la región (no exclusivamente en el área de gestión patrimonial). Así lo afirma Drew Figdor, gestor del fondo Lyxor/Tiedemann Arbitrage Strategy Fund y experto en fusiones y adquisiciones con 26 años de experiencia a sus espaldas.
El experto prevé un repunte en los movimientos corporativos en Europa "porque vienen de mínimos históricos y a medida que se está saliendo de la incertidumbre económica están apareciendo más apuestas oportunistas, de compañías que en realidad no quieren comprar". Figdor señala que en este proceso Europa lleva un retraso de unos dos años con respecto a Estados Unidos. Otra de sus previsiones es que el repunte del M&A "empiece desde el extranjero", es decir, con compañías de otros continentes adquiriendo compañías europeas. También ayuda el hecho de que abundan las empresas que han hecho los deberes durante la crisis, desapalancándose, y que ahora tengan una tesorería más que saneada, con dinero listo para gastar.
Por el momento, lo único seguro es que el M&A en Europa está incrementándose, aunque de una forma muy tímida. Según datos proporcionados por la plataforma Merger Market, en el primer trimestre de 2014 se han cerrado 1.227 operaciones por un valor conjunto de 118.900 millones de euros, un 1,03% más que en el cuarto trimestre de 2013 y un 1,16% más con respecto al primer trimestre del año pasado.