La banca privada española se encuentra sobre un punto de inflexión y debe reordenarse, reestructurarse y enfrentarse a un nuevo cliente. Los representantes de cuatro modelos distintos de entidades que operan en España se reúnen en el Think Tank BNY Mellon, Banca Privada 2.0, para compartir las distintas visiones sobre la evolución del sector. La […]
La banca privada española se encuentra sobre un punto de inflexión y debe reordenarse, reestructurarse y enfrentarse a un nuevo cliente.
Los representantes de cuatro modelos distintos de entidades que operan en España se reúnen en el Think Tank BNY Mellon, Banca Privada 2.0, para compartir las distintas visiones sobre la evolución del sector. La banca privada ha asumido numerosas variaciones desde el comienzo de la crisis.
Un entorno de bajo crecimiento, un mejor asesoramiento y una mayor concentración podrían considerarse de ahora en adelante las características idóneas del sector. “La visión actual no es buena”, defiende Sergio Navarro, de A&G Banca Privada, mientras argumenta ideas como el decrecimiento del volumen de gestión, la reducción del número de bancas y la especialización y reorganización de las entidades para ofrecer al cliente el servicio que requiere.
Todo esto puede ofrecer una gran oportunidad para aquel que logra adaptarse, pues la generación de riqueza volverá en unos cinco años, según estima Sergio Navarro. Y en ese momento habrá menos jugadores, aunque más especializados y deberán también competir con players extranjeros.
Navarro llama a la reflexión en torno a los próximos cinco años, que considera decisivos. Hay una incidencia regulatoria y fiscal muy grave, y ahí hemos dejado pasar diez años. Las entidades españolas están en inferioridad de condiciones para competir por eso trasladan sus centros a Luxemburgo o Londres. Con AIFMD podemos perder otro tren, declara dadas las barreras que va a hacer más livianas para entidades foráneas dejando a las nacionales en inferioridad.
MiFID ha resultado también inútil en los últimos años dado que no ha logrado proteger al cliente frente a la venta de determinados productos. Sergio Navarro afirma tener dudas de que la nueva normativa de protección vaya a resultar demasiado redundante. El track record debería servir para algo a la hora de hacer las normas.
Las entidades más especializadas han logrado perder menos confianza de los inversores, dentro de la bajada que ha experimentado el sector dice Sergio. Ahora el cliente experimenta un rechazo hacia el gestor “el todo vale y el gratis total ya no van a valer” sin perder de vista que las posibilidades para el cliente se multiplican cada vez más internacionalmente.
A&G es una entidad especializada en banca privada y por ello no segmentan a los clientes. Los banqueros quieren poder desarrollar su trabajo de forma independiente y sin campañas. La oferta que ofrece esta gestora va desde la administración de carteras de fondos, sicav de fondos, fondos de fondos…
En cuanto a la situación actual, Sergio Navarro afirma que no estamos ante un gran salto tecnológico, sino ante la búsqueda de un nuevo soporte para que los clientes puedan acceder a la información y los distintos servicios a través de cualquiera de los medios que tienen a su alcance, el gran avance lo supuso el hecho de generar toda esa información.