Las tres Autoridades Europeas de Supervisión (EBA, EIOPA y ESMA) siguen insistiendo en la persistencia de una elevada incertidumbre económica. En el marco de la publicación de su último informe de los riesgos y vulnerabilidades del sistema financiero de la UE, las autoridades han advertido a los supervisores nacionales de los riesgos para la estabilidad financiera derivados del aumento de la incertidumbre, y piden vigilancia a todos los participantes en los mercados financieros.
Los últimos años han presentado una serie de acontecimientos adversos, como la agresión rusa contra Ucrania, la crisis energética y las turbulencias de los bancos medianos estadounidenses en marzo de 2023, que la mayoría de las instituciones financieras han sorteado bien, reconocen las autoridades europeas. “No obstante, la economía europea sigue atravesando un periodo de mayor incertidumbre que presenta riesgos importantes para la estabilidad financiera que exigen la vigilancia de todos los participantes en los mercados financieros”, insisten. Las perspectivas económicas siguen siendo frágiles, sobre todo en un contexto de riesgos geopolíticos persistentemente elevados, inflación alta y perspectivas macrofinancieras inciertas.
El aumento de los tipos de interés ha generado impactos heterogéneos
Las repercusiones en el mercado de las turbulencias registradas en el sector bancario en marzo también ponen de relieve la persistente sensibilidad del sistema financiero europeo a las perturbaciones exógenas y la elevada incertidumbre que reina en los mercados. “El nerviosismo del mercado y las malas noticias sobre partes del sistema financiero podrían propagarse rápidamente y provocar un aumento general de la aversión al riesgo”, advierten.
Además, detectan que el aumento de los tipos de interés ha generado impactos heterogéneos en el sector financiero. “Esto se tradujo en un aumento de los ingresos netos por intereses para los bancos, una reducción de la rentabilidad para las aseguradoras y riesgos de liquidez para el sector de gestión de activos”, apuntan.
Propuestas de las autoridades europeas
En este marco, el las autoridades europeas han elaborado una serie de recomendaciones sobre medidas a adoptar para las autoridades nacionales competentes, a las instituciones financieras y a los participantes en el mercado:
- Las instituciones financieras y los supervisores deben vigilar de cerca el impacto más amplio de los fuertes aumentos de los tipos de interés oficiales y las subidas repentinas de las primas de riesgo, y tenerlo en cuenta en la gestión de riesgos.
- Las instituciones financieras y los supervisores deben seguir estando preparados para un deterioro de la calidad de los activos en el sector financiero. Los supervisores deben seguir vigilando de cerca la calidad de los activos y las provisiones para insolvencias.
- Las instituciones financieras y los supervisores deben ser conscientes del impacto del riesgo de inflación y vigilarlo de cerca. La inflación no sólo repercute en las instituciones financieras por sus efectos sobre la calidad y la valoración de los activos, sino también a través del aumento de los gastos y de los costes de financiación como consecuencia de la subida de los tipos de interés y de otros canales.
- Las instituciones financieras deben conceder gran importancia a la gestión eficaz del riesgo y a los mecanismos de gobernanza, en particular en relación con el riesgo de liquidez y el riesgo de tipos de interés, como ponen de relieve los recientes problemas en EE.UU. y Suiza. Las instituciones financieras deben seguir siendo resistentes al impacto de futuros cambios sustanciales de los tipos de interés
