Los BRIC (Brasil, Rusia, India y China) contribuirán con 100.000 millones de dólares a un fondo cambiario para estabilizar los mercados de divisas, comentó la semana pasada el presidente de Rusia, Vladimir Putin. El objetivo es estabilizar el mercado
La publicación británcia realizó un índice que combina cuatro factores: déficit por cuenta corriente, nivel de deuda externa a corto plazo en relación al nivel de reservas de divisas, crecimiento del crédito y apertura de los mercados financieros. Entre los resultados se encuentra que los casos más vulnerables a una caída de la inversión extranjera en Latinoamérica son Colombia, Argentina, Brasil y Venezuela. Estas dos últimas debido, principalmente, a la importante depreciación de sus monedas con respecto al dólar en el último año.
Entre los casos medios se encuentran México y Chile. En el caso del primero, la publicación indica que su divisa ha conseguido mantenerse prácticamente sin cambios en el último año a pesar de las turbulencias. Sin embargo, "el crecimiento del crédito y los altos niveles de la apertura financiera son posibles puntos de fragilidad", indica la revista. Por su parte, el caso chileno está muy cerca de la zona roja debido, en parte, a la apertura de su mercado y al déficit por cuenta corriente.
Fondo de estabilidad cambiaria
En un comunicado tras la reunión que mantuvieron los líderes de los BRIC en el marco de la Cumbre del G20, las principales economías emergentes afirmaron que “la eventual normalización de las políticas monetarias necesita ser calibrada con efectividad y cuidado y claramente comunicada”. Por ello, acordaron crear un fondo común de 100.000 millones de dólares (en vez de los 240.000 millones previos) con el objetivo de estabilizar los mercados de divisas globales.
El presidente ruso indicó que la iniciativa “de establecer un fondo cambiario de los BRICS se encuentra en su etapa final”. China, dueño de las reservas de moneda extranjera más grandes del mundo, aportará la mayor parte del fondo de estabilidad cambiaria.
Este mes se espera que la Fed de sus primeros pasos en la reducción de su programa de estímulo monetario, lo que afectará al sistema financiero global, en el que el dólar constituye el 62% de los activos.