Man GLG Alpha Select Alternative: resistencia contra viento y marea

Nick Judge y Charles Long (Man)
Fotos: cedidas por Man.

No está siendo un buen año para los fondos de gestión alternativa líquida. De media, la rentabilidad generada por los productos englobados dentro de la categoría Market Neutral de Morningstar han generado una rentabilidad del -0,81%, con una ratio de Sharpe de -0,32. El mal comportamiento generalizado es una de las razones que explica el desinterés de los inversores por este tipo de productos, plasmado en unas salidas netas de dinero en 2023 del orden de 5.000 millones de euros.

Sin embargo, en media de este mal tono general hay estrategias que están consiguiendo brillar. Una de las que más lo están haciendo es el Man GLG Alpha Select Alternative, uno de los fondos de gestión alternativa con más patrimonio en España, según refleja el barómetro que publica la revista FundsPeople. El producto, que cuenta con Rating FundsPeople este año, ha generado en los últimos tres años un retorno anualizado neto en euros de casi el 6%, con una volatilidad del 4,2%. Su ratio de Sharpe en este periodo (1,08) y un alpha del 4,06 demuestran la buena gestión realizada. Este año gana un 7,7%, según datos de Morningstar.

Se trata de un fondo de retorno absoluto UCITS de renta variable long-short con enfoque market neutral. Invierte en compañías muy líquidas del Reino Unido. La cartera está formada por entre 100 y 150 valores. Sus gestores son Charles Long (a la derecha de la imagen) y Nick Judge. El objetivo que se han fijado con el fondo es generar rentabilidades positivas a través de la selección de títulos a 12 meses.

Proceso de inversión

Su proceso de inversión se basa en el análisis fundamental. Tienen más de 20 años de experiencia en la gestión de renta variable británica y conocen muy bien su universo. El acceso y las visitas a compañías son, para ellos, un factor clave. Realizan unas 300 al año. No hacen apuestas sobre su visión macro, sino que se centran en la selección de títulos. Para ello realizan una estimación de los beneficios de la compañía a 2-3 años vista según su propio proceso de análisis y las comparan con el consenso de mercado.

En función de si la compañía está infra/sobrevalorada deciden si toman una posición larga o corta. El no hacer apuestas macro lo cumplen estrictamente desde el referéndum del Brexit, ya que desde entonces decidieron no posicionarse en eventos binarios. En este tipo de escenarios suelen reducir su exposición bruta hasta que el mercado se normaliza, para que su rentabilidad dependa en mucha mayor medida de sus decisiones de inversión a nivel compañía y no de factores macro. Actualmente, el fondo está en soft close.