Jaime Raga explica el posible camino que debería llevar un inversor en renta fija tras el fin de las subidas de tipos por parte de los bancos centrales. Comentario patrocinado por UBS Asset Management.
TRIBUNA de Jaime Raga, Senior CRM, UBS AM Iberia. Comentario patrocinado por UBS Asset Management.
Los bancos centrales de todo el mundo están a punto de concluir uno de los ciclos de endurecimiento monetario más agresivos de los que se tiene constancia. Se trata de un hito importante para los mercados de renta fija y constituye un punto de entrada idóneo para los inversores. Estas son las posibles implicaciones para el comportamiento de este activo en un mundo posterior a un ciclo restrictivo.
Los bancos centrales contraatacan
La economía mundial se está normalizando casi dos años después de las primeras subidas de tipos. El repunte de la inflación ha tocado techo y sigue una tendencia a la baja más convincente hacia su objetivo, como muestra el gráfico 1. Esto supone un alivio muy necesario para los banqueros centrales de todo el mundo, que están cada vez más seguros de que la política monetaria restrictiva aplicada por primera vez hace más de un año está teniendo un efecto sobre la inflación.
Gráfico 1. % de variación interanual del IPC
¿Hacia dónde nos dirigimos? A medida que la inflación sigue moderándose la probabilidad de nuevas subidas de los tipos de interés disminuye. Tanto las previsiones de los economistas como las expectativas del mercado (véase el gráfico 2) apuntan a que los tipos de interés oficiales están cerca de sus máximos o muy cerca de ese nivel. Este cambio de postura política da paso al siguiente episodio para la renta fija.
Gráfico 2. Tipos de interés oficiales actuales y a 6 meses vista (%)
¿Una nueva esperanza para los inversores de renta fija?
El aumento de los tipos de interés en todo el mundo ha situado las TIR de los bonos en máximos de la última década. Como muestra el gráfico 3, en la mayoría de los sectores su nivel se sitúa cómodamente dentro del percentil 90 de las marcas alcanzadas desde 2007. Unas TIR más elevadas proporcionan a los inversores cierto aislamiento frente al posible impacto negativo que podrían suponer nuevas subidas de tipos o la ampliación de los diferenciales de crédito. De hecho, en lo que va de año, el efecto sobre la rentabilidad de las nuevas subidas de las TIR de la deuda pública se ha visto compensado por los mayores niveles de income, que han constituido el principal motor de la rentabilidad.
Gráfico 3. TIR mundiales en máximos de la década
Aunque la volatilidad de los tipos de interés sigue siendo elevada, es probable que la subida de la TIR continúe respaldando la rentabilidad de la renta fija, sobre todo porque parece que los bancos centrales mundiales se acercan al final del endurecimiento de sus políticas monetarias. Con un atractivo potencial alcista, una buena protección contra las caídas y un atractivo punto de entrada, los inversores en renta fija tienen ante sí una oportunidad de oro.
¿Que la rentabilidad te acompañe?
En muchos mercados de renta fija, la inversión de la curva se traduce en que las TIR más atractivas se sitúan en su parte corta. Pero ahora que las subidas de tipos quedan cada vez más atrás, los inversores deberían mirar hacia el futuro, hacia la fase posterior al ciclo de subidas y, por lo tanto, diversificar la exposición más allá de la curva, donde las posibles ganancias de capital son mayores en caso de bajada de los tipos de interés. Añadir exposición con antelación es fundamental, dado que históricamente los tipos a largo plazo han descendido bruscamente tras la conclusión de los ciclos de subidas de tipos, como ilustra el gráfico 4.
Gráfico 4. Las TIR caen con rapidez cuando los bancos centrales dejan de subir los tipos
La historia nos indica que el periodo inmediatamente posterior a la conclusión de los ciclos alcistas puede ser lucrativo para los rendimientos de la renta fija. Como demuestra el gráfico 5, esto es especialmente evidente en los bonos a más largo plazo, en los que la duración es un factor determinante de las plusvalías. Una vez que los tipos de interés empiezan a bajar, la rentabilidad total de mantener un bono de mayor duración y fecha de vencimiento durante un periodo fijo es significativamente mayor que la rentabilidad total de reinvertir repetidamente en bonos de corta duración y fecha de vencimiento.
Gráfico 5. Comportamiento de los bonos del Tesoro de EE.UU. 12 meses inmediatamente después de la última subida de tipos del ciclo
Aunque la parte corta es atractiva en términos de TIR, los inversores deben tener en cuenta otras fuentes de rentabilidad total, a saber, la duración y los diferenciales de crédito: diversificar más hacia los tramos largos de la curva para beneficiarse de las plusvalías derivadas de la duración, dado el comportamiento histórico de los mercados de renta fija tras los ciclos de subidas de tipos.
Hacía tiempo que esperábamos este día
Mientras los bancos centrales se paran a reflexionar, la propuesta de valor de la renta fija parece convincente. Las TIR más altas de la última década ofrecen un atractivo punto de entrada para los inversores, mientras que la perspectiva de tipos más bajos implica que podrían producirse importantes ganancias de capital.