Luca Tenani, responsable de Schroders en Italia
Con un patrimonio de 8.000 millones de euros, Schroders se ha convertido en la segunda mayor gestora internacional en el mercado italiano. Un 65% de ese dinero está en el segmento de distribución minorista (incluyendo banca privada) y el 35% restante corresponde al mercado institucional. La gestora británica espera que esta segunda parte del negocio pueda crecer en los próximos años y lograr una mayor diversificación tanto por tipo de producto como de cliente.
“Hace cuatro años, la mezcla era totalmente opuesta. Mifid ha tenido un impacto negativo sobre los fondos de fondos en Italia. Pero el negocio se está recuperando, la gente entiende que hay un valor en los fondos de fondos y que las comisiones que cobran son razonables. De hecho, las captaciones se están equilibrando porque los inversores institucionales van ganando peso”, explica Luca Tenani, responsable de Schroders en Italia.
En España, de hecho, la gestora también apuesta por ampliar su base de clientes institucionales. En el negocio italiano de mandatos, donde según varias fuentes se ha registrado una guerra de precios, Schroders se quiere centrar sólo en los más grandes. “Los bancos medianos y pequeños están más dispuestos a delegar la gestión de algunos de sus fondos. Creo que esta tendencia aumentará en el futuro. Es pronto para que se dé en las grandes entidades, pero es un mercado creciente”, afirma Tenani.
La cuota de mercado de las gestoras internacionales, según Tenani, aumentará. “Ahora tenemos un 20% del mercado. Ese porcentaje sólo puede crecer, no va a retroceder”, dice.
La gestora británica confía en que el servicio de asesoramiento independiente se expanda. “Crecerá la necesidad de arquitectura abierta, pero no veo arquitectura abierta en banca minorista, donde sólo se aplica a través de fondos de fondos. Eso sí, veo una tendencia hacia arquitectura guiada, que implica más transparencia, más compromiso y evitar sorpresas negativas”, explica Tenani.
Schroders da mucha importancia a la formación de las redes de venta de las entidades. “Tenemos un equipo dedicado a entrenar y formar a las fuerzas de venta y otro de asesoramiento en inversión, que da ideas a los clientes y que actúa como nexo entre los gestores de Schroders y nuestros distribuidores”, explica Tenani.
Recorrido para la renta fija privada
El superventas de Schroders en 2009, el Schroder SISF Euro Corporate Bond Fund, sigue captando dinero en Italia. Tenani cree que hay razones para que esto siga siendo así durante algún tiempo. “La renta fija corporativa lo hará mejor que la liquidez, aunque no se pueden esperar rentabilidades como las de 2009. Además, el proceso de due diligence es muy largo. Hay inversores que llevan seis meses analizando el fondo y ahora están listos para entrar. Por otro lado, el inversor minorista compra lo que ha funcionado mejor”, señala.
El patrimonio, afirma Tenani, se está concentrado en los extremos, en productos de muy bajo riesgo, por una parte, y en otros de alto riesgo, como los que invierten en mercados emergentes. “Los inversores son muy conservadores y están muy confusos ante el futuro de los mercados financieros. Se perciben riesgos y dudas en todos los mercados. Es muy difícil elegir. Por eso posiblemente los fondos mixtos tienen tanto éxito. La gente está dispuesta a delegar la distribución de activos”, añade.