Los profesionales de Ibercaja Gestión, GVC Gaesco Gestión, Trea AM y MCH IS hacen balance de la última (no) actuación de Janet Yellen.
Mucho revuelo se había generado en el mercado y entre los profesionales de la inversión en torno a cuándo tendrá lugar la primera subida de tipos de interés oficiales de la Fed estadounidense en 2016. Y la respuesta llegó ayer, en boca de su responsable, Janet Yellen. Al final, la Fed fue más dovish de lo que el mercado esperaba. Decidió no subir los tipos y rebajó de cuatro a dos las subidas previstas para este año, de 25 puntos básicos cada una.
Por lo general, ha sido una noticia bien acogida por los gestores de fondos españoles. “Dada la volatilidad en los mercados y el sentimiento negativo todavía reinante, la Fed ha hecho bien en adoptar un tono acomodaticio”, considera Álvaro Sanmartín, economista jefe y asesor del fondo Alinea Global en MCH IS. El mensaje principal que extrae su firma es que la Fed quiere cuidar la recuperación americana y quiere garantizar también que la inflación sube lo suficientemente rápido hasta el 2%. “Debería ayudar a disipar los tantas veces exagerados riesgos de deflación. De hecho”, apunta Sanmartín, “la Fed reitera que, con tal de garantizar que la inflación sube hasta el 2%, estaría dispuesta incluso a permitir que la inflación se vaya por encima de esa tasa durante algún tiempo”.
La mayoría de pronósticos apuntan ahora a que las subidas de tipos se producirán en las próximas reuniones de junio y diciembre, señala Albert Enguix, gestor de GVC Gaesco Gestión. Según prevé, las bolsas europeas sufrirían ante estos movimientos. “Si atendemos a las consecuencias de los últimos movimientos del tipo de cambio en los indicadores bursátiles, hemos observado que una depreciación del dólar favorece a los emergentes y así lo están confirmando los futuros. Cabe añadir que, en los principales indicadores bursátiles europeos, sucede lo contrario y vemos cómo estos movimientos son indicativos de caídas. El ejemplo más cercano lo tuvimos en la última reunión del presidente del BCE el pasado 10 de marzo”, recuerda.
Lo que le preocupa a Ricardo Gil, responsable del área de Retorno Absoluto de Trea AM, es que el mercado se ha quedado con las revisiones a la baja del crecimiento. “La cuestión es que cualquier noticia que implique menores crecimientos aviva las dudas sobre la sostenibilidad en los crecimientos de beneficios y las valoraciones de los activos de riesgo”, sostiene.
Activos beneficiados y nuevos riesgos
A juicio de Beatriz Catalán, gestora de Ibercaja Gestión, “el resultado será, al menos por el momento, favorable para el mercado tanto de renta variable como de renta fija”, una afirmación a la que Sanmartín, de MCH IS, hace una puntualización: “En ese sentido, hay que tener cuidado con las posiciones largas en bonos públicos a largo plazo porque podrían generar sorpresas negativas en los próximos meses”.
Quizá el riesgo que se pone ahora sobre la mesa es “que la Fed suba tipos más tarde, pero a un ritmo superior al que prevé el mercado”, indica Catalán. “Si el crecimiento mantiene su ritmo actual y el precio del crudo se estabiliza en sus niveles actuales, la inflación puede acercarse al 3% a principios del 2017. En ese momento, es probable que los tipos suban más que los 25 pb que el mercado espera para todo el 2017”, advierte la gestora de Ibercaja.