El decálogo definitivo de riesgos a tener en cuenta en 2018

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Chris Samuel, flickr, Creative Commons

Aunque los primeros comentarios sobre cómo irán las inversiones en 2018 son constructivos, también es cierto que parte del mensaje de las gestoras se ha centrado en torno a la presencia de varios riesgos heredados de 2017, como por ejemplo la reversión de la política monetaria europea o las tensiones geopolíticas en mercados emergentes. Esty Dwek Roditi, especialista de inversión de Natixis IM, ha elaborado un conciso decálogo con los riesgos que juzga más importantes para la inversión en este año recién empezado.

El primer riesgo es el de pensamiento único, dado por el consenso. “Muy pocos puntos de vista (incluido el nuestro) divergen del consenso. ¿Durante cuánto más tiempo podemos estar todos en lo cierto? Si el mercado es complaciente, ¿qué podría pasar cuando se despierte?”, se pregunta la experta.

El segundo riesgo es que el crecimiento flaquee. Roditi explica que “el principal factor que está apoyando el rally (especialmente en renta variable) es la convicción de la continuación de un crecimiento global robusto”. Por tanto, se pregunta qué pasaría si la previsión de crecimiento empezara a flojear, o si lo hiciera tan sólo una de las grandes regiones económicas.

Resulta curioso que la especialista no hable de la normalización bancaria hasta el riesgo número tres. Esto es debido a que el mercado ha recibido avisos por parte de los grandes bancos centrales sobre sus planes para eliminar estímulos. Lo que preocupa a la experta es que “si los bancos centrales se volvieran más hawkish más rápido de lo esperado, los mercados se asustarán”. En la misma línea, cree que “si el BCE se queda sin bonos y acaba el QE antes de septiembre, también podría espantar al mercado de renta fija, incluyendo al high yield europeo”. La especialista también llama la atención sobre el hecho de que, a medida que los bancos centrales retiren sus inyecciones de liquidez, se incrementarán los riesgos sobre las compañías más apalancadas.

La volatilidad es el riesgo número cuatro. Roditi aclara que en Natixis IM prevén que ésta se incremente gradualmente; lo que le preocupa es que “los mercados se han vuelto complacientes en cierto modo, y si los mercados ven de repente muchos giros violentos, el rally podría estar en peligro”. A esto se suma el hecho de que los riesgos geopolíticos no se han ido… ocupan los puestos ocho y nueve de este decálogo.  

Un quinto riesgo a tener en cuenta es que ninguna clase de activos – ni acciones, ni bonos- está barato actualmente. “Las valoraciones ajustadas podrían empezar a pesar sobre el sentimiento de mercado, especialmente si el crecimiento muestra signos de ralentización”, explica la experta. Ésta insiste en que es el crecimiento lo que está sosteniendo a las bolsas, con la tesis de inversión de que los beneficios empresariales seguirán al alza. “Es decir, que los mercados están ignorando a las valoraciones, porque los beneficios son fuertes; pero si el apoyo del crecimiento se afloja, puede que los mercados se vuelvan menos optimistas”, sentencia.

Los siguientes de la lista son la combinación inflación+divisa en EE.UU. El consenso de mercado es que la inflación se dirigirá gradualmente hacia el objetivo del 2% impuesto por la Fed. “Pero si sucede más rápido o llega más alto de lo esperado, el dólar se podría apreciar, y por tanto se produciría un endurecimiento de facto de las condiciones monetarias en el resto del mundo” explica la representante de Natixis IM, con mención especial a los emergentes.

También está la cuestión de cómo se comportarán los bonos de mayores vencimientos. La experta observa que no se han movido demasiado – acabaron 2017 muy cerca de donde lo empezaron-, y que no deberían subir mucho más si se cumple la previsión de una inflación contenida. “Pero si retrocedieran repentinamente, los mercados podrían asustarse rápidamente”, advierte. El otro peligro viene dado por la posibilidad de que se invierta la curva, ya que “podrían saltar las preocupaciones en torno a una recesión”.

Como decíamos, la experta sitúa en el octavo y el noveno punto del decálogo al retorno del populismo y la geopolítica, respectivamente. En el primer caso, aunque constata que la mayor parte de las elecciones europeas terminaron con resultados favorables al mercado, también recuerda que los movimientos populistas no se han disuelto: “Alemania aún no tiene una coalición, Italia tiene elecciones en camino, y lo mismo con México y más países. El populismo todavía puede tener impacto sobre los mercados, incluso aunque Le Pen se haya quedado fuera”, advierte la experta. En cuanto a la geopolítica, se limita a proporcionar una lista de riesgos latentes e imprevisibles: Corea del Norte, Rusia, una guerra comercial, la renovación del techo de deuda en EE.UU., las negociaciones del Brexit o posibles movimientos de Trump podrían hacer “que sucediera algo malo”.

La especialista en inversiones sitúa en el último punto del decálogo lo que denomina “la desilusión en la revolución tecnológica”. Se refiere a que “las grandes tecnológicas podrían dejar de ser vistas como creadoras de valor o disruptoras positivas, lo que llevaría a una reversión del sentimiento”. Teniendo en cuenta que la FAANG concentran una parte importante de la capitalización del mercado, la experta advierte que un cambio de percepción negativo “también podría impactar a todo el mercado”.