“Este año el trabajo más difícil lo tiene el gestor de renta fija”

041
Cedida

La economía mundial tiende a mejorar. “Los indicadores de PMI son consistentes y apuntan a un crecimiento económico global del 3,5% para 2014”, asegura Manuel Arroyo, director de Estrategia de J.P. Morgan Asset Management para España y Portugal. Este positivo entorno macroeconómico será muy favorable para los activos de riesgo, sobre todo para la renta variable, la clase de activo favorita de la gestora en estos momentos. Sin embargo, quizás las rentabilidades que el inversor vaya a obtener en 2014 sean menos generosas que las del ejercicio anterior. “Este año esperamos rentabilidades de un dígito y volatilidades de dos”.

En el tradicional desayuno trimestral con prensa celebrado por la entidad, Arroyo revelaba que en la gestora siguen mostrándose constructivos en el mercado de acciones, tanto en lo que respecta al estadounidense como al europeo. Motivos hay para el optimismo a ambos lados del Atlántico. “En Estados Unidos el crecimiento económico se verá apoyado por el menor ajuste fiscal que realizará el país este año, unas cuentas del sector privado que se encuentran en una situación mucho más saneada, unas empresas con liquidez en sus balances y una relajación de las condiciones de acceso al crédito”, explica el experto. En Europa las perspectivas también son favorables, aunque por otras razones.

“Seguimos apreciando síntomas de mejoría en la economía europea”, afirma. Tres son los motivos que le empujan a ser optimista. “En primer lugar, el menor ajuste fiscal que la región implementará en 2014 con respecto a años anteriores. En segundo término, existen claras expectativas a ver una recuperación del consumo, después de que muchas familias hayan estado retrasando a lo largo de los últimos años sus decisiones de gasto en bienes duraderos. Y, en último lugar, está el hecho de que Europa está ganando competitividad gracias a la reducción de los costes laborales, siendo España uno de los países que han hecho un mayor esfuerzo en la reforma del mercado laboral".

En el caso concreto de España, Arroyo considera que la mejoría que ha experimentado su economía es evidente. “La situación de las economías periféricas, en general, y de la española, en particular, está mejorando”, asevera. Sin embargo, todavía existen riesgos importantes. Uno de ellos es la posibilidad de que se produzca una divergencia en la evolución económica de estas economías con las del núcleo de Europa, lo que pondría en una encrucijada al BCE sobre qué hacer en esa situación. Otra de las preocupaciones de J.P.Morgan AM es la inflación. “La última referencia de inflación en Europa es del 0,7%, un nivel que sigue marcando una tendencia desinflacionista si bien, en nuestra opinión, ésta ha tocado suelo”, indica.

En cuanto a Japón, Arroyo reconoce que las expectativas de la casa son positivas por el mayor compromiso de las autoridades niponas con las políticas enfocadas a impulsar el crecimiento económico, sobre todo en el ámbito fiscal y monetario. “Aunque hay dudas sobre la eficacia del plan a medio-largo plazo puesto en marcha por las autoridades y el país sigue teniendo un problema demográfico y de excesivo endeudamiento, lo cierto es que Japón está consiguiendo más crecimiento, más inflación y reflación de los activos, como evidencia el hecho de que el mercado de renta variable nipón haya subido un 80% desde noviembre de 2012”, afirma.

Arroyo no contempla cambios en la política monetaria a corto plazo. “Las autoridades monetarias van a seguir impulsando a los ahorradores a elevar el riesgo de sus carteras. El balance de la Reserva Federal va a seguir creciendo”. Estima que la autoridad monetaria americana seguirá manteniendo los tipos de interés en niveles bajos hasta, al menos, 2015. En el caso del Banco de Japón, tampoco prevé cambios significativos. “El programa de la institución es el mayor experimento de política monetaria. Si se llevan a cabo más medidas, serán en la misma línea que las puestas en marcha hasta ahora”, señala el experto.

Visión de mercado

Con todo esto… ¿qué esperar de la evolución de los mercados? El director de Estrategia de J.P. Morgan AM para Iberia considera que, a pesar del rally registrado por la renta variable a lo largo de los últimos tiempos, al mercado de acciones aún le queda recorrido, sobre todo si se compara con periodos de recuperación vividos en situaciones anteriores. Si se compara con otras clases de activos, las acciones también se presentan –en su opinión- muy atractivas. “A pesar del buen comportamiento registrado por las bolsas y que las acciones están en precio, la prima de riesgo de la renta variable es más atractiva que la de la renta fija. La bolsa no está cara frente a los bonos”, afirma.

Otra cosa es la situación de los mercados emergentes, donde el precio/valor contable se encuentra en niveles muy próximos a uno. “Aquí cabe preguntarse si éstos están baratos por una buena razón. La respuesta es que depende de cada mercado. Lo que estamos viendo en algunos de estos países es una crisis de libro de la balanza de pagos. Aquí ser selectivos es crucial, ya que los mercados están penalizando a aquellos países que tienen una dependencia financiera excesiva del exterior”. En el caso del mercado de deuda emergente, la situación es igualmente difícil, sobre todo tras lo vivido en 2013. En esta clase de activo, las preferencias de Arroyo es deuda pública emitida en divisa fuerte (hard currency) de aquellos países que se puedan ver favorecidos por la recuperación de las economías desarrolladas.

Con todo, el experto reconoce que el gran reto para 2014 está en el mercado de bonos. “El trabajo más difícil este año lo tiene el gestor de renta fija. Las rentabilidades esperadas son muy bajas y el riesgo muy elevado. En líneas generales, vemos pocas oportunidades. En muchos casos, las rentabilidades reales de los títulos a corto plazo son negativas. Las que ofrecen los bonos con vencimientos más largos son más atractivas, si bien el riesgo de duración es enorme. En high yield las tires tampoco están en niveles extraordinarios, si bien es una clase de activo más interesante dado el bajo nivel de default que existe en estos momentos y los balances más saneados de las compañías”. En cambio, el experto sigue viendo valor en la deuda periférica, donde continúan haciendo apuestas de valor relativo frente a la deuda ‘core’. En lo que respecta al mercado de materias primas, Arroyo considera que “el super ciclo de las commodities se ha terminado”.