Las causas que explican que la gran banca española española haya entrado de lleno en el negocio de los family office

family office, trabajo equipo
Firma: Jared Arango (Unsplash)

En menos de dos años, dos grandes entidades españolas, CaixaBank y Bankinter, han lanzado sendos servicios de multi family office dirigidos a sus clientes de grandes patrimonios. La primera, en mayo de 2022, fue CaixaBank con Openwealth, que en apenas un año cuenta con más de 25 clientes y más de 4.000 millones de euros en activos bajo supervisión. La segunda ha sido Bankinter. En el mes de febrero puso en marcha su multi family office que ya da servicio a cinco grupos familiares. Y se espera que en los próximos meses haya más entidades nacionales que desarrollen también modelos similares.

Las dos razones principales

Las razones que están detrás de esta inmersión de la gran banca en el modelo de negocio de los family office (FO) son varias. Quizá la más importante se refiere a que en los últimos años se ha asistido a muchos eventos de liquidez por parte de las empresas. Según explica Alberto Ruiz, consejero delegado de Omega Capital, en España se han asistido a tres oleadas de creación de family office. "El primer impulso tuvo lugar a finales de los 90, con la consolidación de nuestro mercado de valores. Las salidas a bolsa de empresas familiares fue el origen de las oficinas familiares más reconocidas en la actualidad. El segundo movimiento estuvo motivado por el incremento de la riqueza inmobiliaria que vivimos tras la entrada de España en el Euro. Después de una temporada de barbecho, crisis del 2008 incluida, estamos asistiendo a un número creciente de oficinas familiares que se están creando después de operaciones de venta de la actividad empresarial familiar, ahora a fondos de capital privado", explica.

Tras esas operaciones de ventas de empresas, los grupos familiares reciben una cantidad ingente de liquidez que requieren esa gestión patrimonial especializada e integral que ofrecen precisamente los family office. Se calcula, además, que en España hay cerca de 3.000 empresarios que son potenciales clientes de recibir ese tipo de servicio.

La otra gran causa que está detrás del auge del modelo de family office por parte de la banca es esa transformación que se está viviendo en la banca privada hacia un modelo más de servicio que de venta de producto, en parte también impulsado por esa defensa del asesoramiento independiente que hizo MiFID II en su día y en el que ahora vuelve a incidir la Comisión Europea con su Retail Investment Strategy. "Los family offices en España se han ido profesionalizando y se parecen cada vez más a entidades internacionales que tienen una forma de invertir muy bien estructurada, con horizontes de inversiones a medio largo plazo y equipos parecidos a los de grandes gestoras de perfil muy institucional", explican desde el family office Orilla AM.

Un modelo al alza

Las previsiones que se manejan para este modelo de servicio son además positivas de cara a los próximos años. Por una parte, debido a que se prevén más operaciones de compra venta por parte de fondos de capital riesgo.  Más teniendo en cuenta la dificultad que tienen muchas de ellas de transferir esas empresas familiares a las siguientes generaciones. Según los datos de Ron Diamond, fundador del Diamond Wealth, que representa a 100 family office, solo el 25% de las family offices llegan a la segunda generación, el 10% a la tercera generación y el 5% a la cuarta. En el caso de España, sin embargo, las cifras son algo mejores ya que según los datos del estudio de Deloitte sobre Family office en la Península Ibérica, el 47% de los family office está dirigido por la segunda generación familiar (el 24% por la tercera y el 6% por la cuarta).

Por otra parte, sus buenas perspectivas se apoyan también en el aumento la demanda de profesionalización por parte los grupos familiares a la hora de gestionar su patrimonio. "Siguiendo la estela del modelo anglosajón, esperamos que los family offices vayan progresando en su nivel de sofisticación y profesionalización, incorporando perfiles con mayor experiencia y amplias capacidades tanto en el mundo de la inversión tradicional como alternativa", explican desde Kefren Capital. De hecho, según explican desde Pactio Gestión, "en el universo de FOs hay una gran diversidad de estructuras y de objetivos de inversión, que parten de situaciones individuales muy diferentes. Se suele decir que no hay dos FOs iguales".

Al fin y al cabo, no solo se trata de dar un servicio de asesoramiento en inversiones o fiscal sino que abarca mucho más. En concreto, según el estudio de Deloitte, el 94% ofrece compliance fiscal, el 82% de los FO españoles ofrece asistencia jurídica, el 79% asesoramiento patrimonial, el 69% asesoramiento en la concesión de financiación y el 59% servicios de concesión de préstamos a familares, por citar algunos.